La victimización se puede dar mediante conductas aprendidas, establecidas o de conveniencia.
La victimización se puede dar mediante conductas aprendidas, establecidas o de conveniencia.
Laura Espinoza Busato

Todos nos hemos cruzado en algún momento de nuestras vidas con una persona que busca victimizarse en una discusión. Su personalidad se caracteriza básicamente por culpar a los demás por lo que les sucede y quejarse para obtener atención emocional de los demás. Además, viene a ser una forma de escondida detrás de palabras. Ante ello, del Diario El Comercio conversó con el Licenciado Héctor Enrique Lazo Huaylino, psicólogo de la Clínica SANNA El Golf, quien nos explica cómo evitar construir esa personalidad.

“Victimizarse es cuando una persona tiene tendencia a considerarse víctima. Se trata de un tipo de defensa psicológica que utilizan muchas personas como filosofía de vida, ya que les hace ganar méritos entre las personas. Ellos suelen desvincularse de su responsabilidad culpabilizando a los demás”, explica Lazo.

Asimismo, según el especialista, victimizarse es una manera de no reconocer nuestra realidad. “No me va bien porque de pequeño no tenía los recursos necesarios para salir adelante”; este es un claro ejemplo de una persona que se victimiza. Lo que la persona debería decir realmente es “trabajo y trabajaré para desarrollarme de este campo y lo voy a lograr”, aquí la persona está aceptando su realidad y cómo tiene que trabajar para sobresalir.

Características de una persona que se victimiza

La victimización se puede dar mediante conductas aprendidas, establecidas o de conveniencia. De esta manera se puede justificar todo lo que hacemos en nuestra vida. La personalidad de una persona que se victimiza es de la siguiente manera:

  • Se queja absolutamente todo.
  • Tiene una visión pesimista del mundo.
  • Exagera o sobredimensiona todo lo que le sucede.
  • Tiene una actitud derrotista ante la vida.
  • Se muestra ante los demás como una persona que necesita protección.
  • Todo es blanco o negro: Los demás deben darle algo o siempre lo deberá recibir, pues no puede lograrlo por si misma.
Foto: iStock.
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  • No se desarrolla la autovaloración: siempre está pendiente de las circunstancias o de las personas que están al costado.
  • Tiene pensamientos irracionales.
  • Tiene la facilidad de manipular o manejar a los demás: “Mientras yo me sienta más víctima, más pena vas a sentir por mí y vas a sentirte en la obligación de saciar esa tristeza”.

Pasos para evitar construir una personalidad victimizadora

El especialista nos brinda algunas recomendaciones para que evitemos construir esa personalidad, tanto en nosotros como en los que nos rodean:

  1. Darse cuenta de lo que ocurre: Es sumamente complicado darse cuenta si es que nos estamos victimizando, pero si notamos algunas de las características ya mencionadas hay que actuar para que no se lleguen a extremos.
  2. Trabajar en el autoconcepto: Sentirnos capaces de hacer las cosas por nosotros mismos sin importar las circunstancias que se viven ni el entorno.
  3. Tratar de no sobre proteger demasiado a los hijos: Debemos dejar de hacer que los hijos piensen que el mundo el blanco o negro, ellos deben hacer las cosas por sí mismos. Cuando crecen y la figura paterna ya no está, comenzamos a echarle la culpa al hecho de que ya no esté.
  4. Buscar ayuda: Tener ayuda profesional de un psicólogo siempre ayudará a ser más conscientes de lo que sucede en nuestro entorno.

“Quién decide el rumbo de nuestras vidas y dejar de ser una víctima, es aquella persona que afronta con decisión y planificación, sin pensamientos irracionales, y sin tener una visión negativa del mundo, es aquella que reconoce y acepta lo que lo rodea. Todo eso es un proceso de formación que se hace en nuestra comunidad, en nuestro colegio y en nuestros hogares”, finaliza.


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