Una rutina de limpieza facial podrá tratar el problema principal de cada tipo de piel, sea seca, mixta o grasa. En cada elemento, se van agregando ingredientes específicos para cada tipo de piel y cada condición. En esa línea, establecer este hábito es muy importante para fortalecer la función de la barrera cutánea.
En ese sentido, en Bienestar El Comercio, conversamos con la Dra. Valerie Dammert, de la Clínica Dermatológica Lima Derma, quien nos compartió ciertos factores que debemos tener en cuenta al momento de establecer una rutina facial en nuestro día a día.
¿Cuáles son los pasos básicos de una rutina de limpieza facial?
Según la Dra. Dammert, una rutina de limpieza facial simple consiste en un jabón para rostro, seguido de una crema hidratante y, para finalizar, un protector solar. Por el lado del protector solar, existe una creencia de que el bloqueador puede ser fastidioso para las personas con piel grasa. Sin embargo, hoy en día existe una amplia disponibilidad de protectores más ligeros, los cuales pueden ser un apoyo para controlar la grasa de la piel.
“Ahora los protectores solares no forman una película blanca como antes. Al contrario, son más ligeros y agradables para pieles grasas”, estableció la especialista.
En tanto a los limpiadores faciales, Valerie Dammert aconseja que, para pieles sensibles o secas, el limpiador en crema que no haga mucha espuma es la mejor opción. En la otra mano, para pieles mixtas o con tendencia acneica, el jabón facial deberá ser en espuma o en gel.
De acuerdo con lo establecido por la especialista, si una persona desea realizar una rutina más elaborada, dependerá mucho del tipo de piel y qué es lo que se busca tratar. Por ejemplo, una piel con manchas tendría que utilizar un antioxidante, como la vitamina C, la cual nos ayuda a protegernos de la contaminación. Asimismo, pueden añadir un despigmentante para manchas.
En esa línea, un elemento que se encuentra en tendencia es el serum. “Cabe recalcar que el serum no es el elemento, sino la textura del producto que te vas a aplicar. Suelen ser más ligeros -casi líquidos- y vienen más concentrados que una crema. Ya casi todo puede venir en forma de serum. Además, al generar una capa delgada, puede dar más ligereza a la piel para el resto de productos”, aclaró Dammert.
¿Tengo que visitar al dermatólogo para elaborar una rutina facial?
Si existe un problema de piel, sería lo ideal poder tener una conversación con un especialista antes de decidir qué productos serán incluidos en la rutina. “Si tienes piel acneica, por ejemplo, es obligatoria una visita al dermatólogo antes”, resaltó la doctora.
La experta hizo hincapié en el caso del acné, pues algunas personas que padecen de esta condición suelen dejar de lado la hidratación en su rutina. No obstante, enfatizó en que tener piel acneica no significa que la piel no necesita hidratación. Es más, el hidratante hará que los productos que utilices para aliviar la piel se absorban mejor.
De la misma manera, es esencial saber qué tipo de piel tienes. Para ello, puedes identificarlo tú mismo observando la zona T de tu rostro. De caso contrario, puedes acudir a un especialista, pues los productos y texturas que utilices serán seleccionados a base de ello.
¿La exfoliación debe ser incluida en la rutina diaria?
El exfoliante elimina las células muertas de la primera capa de la piel. En palabras de la Dra. Valerie Dammert, recomienda utilizar este producto solo una vez por semana. En pieles acneicas -con ‘puntitos negros’-, por otro lado, puede ser utilizado dos veces por semana. No obstante, si la piel cuenta con una enfermedad inflamatoria con granos rojizos, no se recomienda esta rutina, pues puede inflamarse más.
Para finalizar, la especialista de la Clínica Dermatológica Lima Derma concluyó que la barrera cutánea tiene que ser fortalecida para no dañarse. A pesar de que cada individuo es distinto, hay ciertos hábitos positivos que pueden mejorar la condición de nuestra piel, como la alimentación.