¿Es posible tener una piscina que se adapte al clima y luzca genial? En Francia, la renovación de una de ellas es el ejemplo perfecto de versatilidad y diseño innovador.
Llamada Piscine Tournesol, fue construida entre 1969. Cuando llegó a manos del estudio Urbane Kultur, estos buscaron mantener la esencia original y simplicidad del lugar. Su gran atractivo es el techo, el cual puede abrirse en días calurosos para evitar que se eleve la temperatura.
(Foto: urbanekultur.fr)
El interior fue modernizado por completo y se construyó una extensión para los vestuarios y las oficinas administrativas. El color blanco y paredes de cristal dan la sensación de claridad y relajación, con pequeñas ventanas redondas que dejan pasar la luz.
Para lograr un diseño más ecológico, el techo de la piscina puede recuperar el agua de la lluvia y darle un mejor uso. También se incorporó un sistema de eliminación de cloramina para reducir el uso de productos químicos.