El mármol puede mantener su belleza de forma indefinida, si eliminamos adecuadamente la suciedad, la tierra y la grasa.
- Barra la superficie cotidianamente. Use trapos blancos limpios y sin motas. Para la limpieza diaria basta con utilizar un jabón neutro y luego enjuagar con agua limpia.
- Utilice productos especializados para piedras naturales.
- Evita usar soluciones ácidas, como ácido muriático, sulfúrico u otros ácidos fuertes, porque deteriorán el brillo del mármoll y crearán manchas que no podrán se removidas.
Cómo remover las manchas
- Averigüe primero con qué se manchó para utilizar el producto idóneo. Entre los más usados están los limpiadores neutros concentrados Solo déjalo sobre la mancha y enjuágalo con abundante agua.
- La frecuencia de limpieza depende de la zona en la que esté instalado y su uso. En una casa la recomendación es limpiar la superficie del mármol diariamente con jabón líquido neutro y una vez a la semana con un poco de producto más concentrado, que pueda ser de limpieza intesiva.
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Las manchas de aceite y óxido se deben limpiar inmediatamente. De lo contrario, estas penetrarán completamente en la piedra
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Para mantener su brillo
Los mármoles pulidos pueden perder el brillo total o parcialmente con el paso del tiempo, especialmente en las zonas de contacto intensivo con el agua y los jabones.
- Mantenerlo con detergentes.
- Emplear ceras especiales para piedras naturales. Para casos muy severos puede ser recomendable un pulido profesional.
- Se puede aspirar, pero se debe tener cuidado de no rayarlo con la máquina aspiradora.