El día del fútbol se celebró hace un día. El 247 de junio de cada año hay que vestirlo con la camiseta 10, de preferencia albiceleste, y festejarlo con buenas jugadas, regates y goles por doquier.
Un 24 de junio nació Lionel Messi. En Rosario el mejor jugador de los últimos años vino al mundo en 1987 y hoy, cada fin de semana nos regala lo mejor de su fútbol.
Nueve años antes, también un 24 de junio llegó al mundo otro crack del fútbol mundial, Juan Román Riquelme. En Buenos Aires nació el hoy ídolo de Boca.
Argentina los crió y el fútbol los juntó. Y los vimos juntos en Eliminatorias y en el Mundial Alemania 2006, aunque Lio no era titular. Se volvieron a juntar en la Copa América Venezuela 2007 y llevaron a Argentina a la final, pero los disfrutamos en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, en el que terminaron con la medalla de oro colgada de sus cuellos.
Se discutió si podían jugar juntos. El fútbol moderno no soportaba a dos 10 dentro del campo, pero fue Maradona el encargado de separarlos, con una absurda discución con el jugador de Boca.
El Día del Campesino fue el elegido para ver llegar a estos futbolistas y llegaron con trofeos bajo el brazo. Messi suma 22 con la camiseta de Argentina y Barcelona, mientras que Riquelme alcanza 17 con la albiceleste, la de Boca y el Villarreal.
Ahora viven historias distintas. Messi triunfa en el Barcelona y es el conductor de Argentina. Riquelme sufre las penurias de un Boca Juniors en una de sus peores temporadas y a la selección albiceleste no volverá.
Pero más allá de realidades, el fútbol los eligió para que un 24 de junio lleguen al mundo y desde pequeños nos encanten con su juego.