En fútbol basta un partido para cambiar dudas por certezas. Que se lo pregunten si no a Gerardo Martino, quien tras su debut oficial como entrenador del Barcelona cosechó todo tipo de elogios.
El técnico argentino logró el domingo el segundo mejor debut de un entrenador en la historia de la Liga española con la victoria del Barcelona 7-0 ante el Levante.
Si la llegada de Martino al banquillo azulgrana estuvo marcada por las dudas —necesidad de un central, adaptación al modelo del Barcelona, elección de titulares—, la exhibición del Barcelona en el primer partido oficial borró tales sospechas.
“Un Barza, del que muchos tenían sus dudas tras los dolorosos cambios de este verano, pero que ayer, con tan solo media hora de juego, ya mostró sus credenciales en esta competición. Fue un claro mensaje a todos sus rivales de que el campeón está aquí, con ganas de revalidar el título, pese a que en el banquillo ya no estén ni Guardiola ni Tito Vilanova”, opinó hoy “Sport”.
PRESIÓN AL RIVAL Son muchos los logros de Martino que ahora destacan tanto prensa como los propios futbolistas del Barcelona. Asuntos, por ejemplo, como la presión al rival, la implicación de todos los futbolistas, la suplencia tranquila de Neymar o la sustitución de Lionel Messi a 20 minutos del final del partido.
Jugadores como Xavi Hernández o Dani Alves ensalzaron las virtudes de Martino, quizá una censura a los métodos utilizados la pasada temporada. “Habíamos perdido cositas y recuperarlo es importante. La presión era lo que nos hacía diferentes a otros equipos. En cuanto lo perdimos nos igualamos y se nos fueron algunos títulos. Ahora el míster nos está mentalizando”, explicó Alves.
“El año pasado entrenamos poco tácticamente cuando se fue Tito”, agregó Xavi. Lo que es una evidencia es que gracias a esa presión sobre el rival, el Barcelona de Martino se pareció más al de Josep Guardiola que al de Vilanova.
Además, el argentino consiguió implicar en el equipo a jugadores como Cesc Fábregas o Alexis Sánchez, futbolistas muy criticados por la hinchada del Barcelona la pasada campaña.
LO SACÓ A MESSI Aunque lo que más llamó la atención fue la sustitución de Messi en la segunda parte, que Martino justificó con toda la naturalidad: “Hace una semanas hablamos y entiende que es bueno descansar”.
Martino logró con Messi lo que antes no lograron ni Guardiola ni Vilanova: sentar al astro. “El Barza de Martino ofreció nuevas señales sobre el patrón básico. Fueron destellos de inteligencia futbolística, con un concepto común: equipo. El entrenador del Barcelona mantiene y potencia lo bueno y sabe imprimir su propio sello”, destacó hoy el diario catalán “Mundo Deportivo”.
Y como el fútbol no para y no ofrece tiempo para digerir ni éxitos ni fracasos, el miércoles regresa el Barcelona a la competición con la disputa de la ida de la Supercopa de España, el primer título oficial de la temporada en España. El rival será el Atlético de Madrid, sin duda un equipo de mucha más talla que el Levante.
Pero, por lo pronto, Martino ya consiguió algo que no tenía hace solo unos días: el aplauso.