Independiente acaba de escribir la página más triste de su historia. El rey de copas cayó 1-0 en casa ante San Lorenzo y descendió a la segunda división (Nacional B) del fútbol argentino por primera vez en sus 108 años de historia.

Correa abrió el marcador para los visitantes en la segunda etapa e inició la debacle. El único resultado que le daba chances de pelear hasta la última fecha la permanencia en primera división a los rojos era el triunfo. Pero no ocurrió así.

No obstante los minutos pasaban y el empate no llegaba, los hinchas de rey de copas empezaron a cantar cada vez más fuerte por el equipo de sus amores, en una muestra de apoyo incondicional. Otros, sin embargo, solo lloraban.

El descenso de Independiente es producto de tres años muy malos que tuvo como resultado el adiós. El equipo está lejos de ser aquel que se ganó el apelativo de rey de copas.

Los rojos deberán jugar aún un partido en el torneo Final. El próximo fin de semana visitan a Colón de Santa Fe.