Después de pasar la noche en una comisaría por enfrentarse con la policía, los jugadores del Arsenal de Sarandí regresaron este jueves a Argentina.

Siete futbolistas pasaron casi toda la noche en la comisaría del estadio de Belo Horizonte por enfrentarse a la policía militar brasileña tras perder 5-2 con el Atlético Mineiro.

Según la prensa brasileña, también lanzaron las sillas y muebles del vestuario e, incluso, habrían agredido a la coronel Claudia Romualdo, quien denunció haber sido golpeada en el pecho.

El cónsul argentino en la ciudad, José Cafiero, dijo que los jugadores explicaron que querían tener una palabra con el referí (el árbitro), que fueron malinterpretados, y que hubo una reacción de la policía injustificada.

Los jugadores fueron liberados y ya están rumbo a su país. Solo recibieron una advertencia, aunque fueron multados con 19 mil dólares, según la prensa brasileña.