Un Palmeiras diezmado por lesiones recibirá mañana en Sao Paulo al Sporting Cristal, equipo que llegó a Brasil con todos sus titulares y decidido a buscar sus primeros tres puntos en el Grupo 2 de la Copa Libertadores, que completan el Libertad de Paraguay y el Tigre de Argentina.

El partido supondrá el debut de ambos conjuntos en el torneo, que el Palmeiras encara sin demasiadas ambiciones y con el ánimo todavía golpeado por su descenso a la segunda división tras la desastrosa campaña del año pasado.

Aunque la principal meta del Palmeiras para este año es regresar a primera, el entrenador Gilson Kleina ha situado a la Libertadores como una de las prioridades de su equipo, que está en deuda con su hinchada y solo puede pagar con títulos.

No obstante, Kleina se verá obligado a improvisar en el inicio del torneo pues no podrá contar con el chileno Jorge Valdivia ni con Tiago Real, Fernandinho y Maikon Leite, todos lesionados.

También deberá rearmar la delantera del Palmeiras, que acaba de perder al argentino Hernán Barcos, transferido la semana pasada al Gremio.

Para suplir la salida del argentino, el Palmeiras ha fichado a Kleber, quien regresó a Brasil procedente del Oporto portugués pero tampoco podrá jugar frente al Sporting Cristal por una lesión en la parte posterior del muslo derecho.

Aunque Kleina no ha confirmado la alineación de su equipo, en los entrenamientos realizados esta semana ha utilizado a los atacantes Caio y Vinicius, dos prometedores jóvenes de 20 años.

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