El centrocampista Paulinho, titular de la selección brasileña que conquistó el domingo el título de la Copa Confederaciones, se despidió del Corinthians para irse al Tottenham inglés.

Es difícil hablar en un momento como este y tengo la plena seguridad que fueron tres años maravillosos en mi carrera. Trabajé con personas correctas y coherentes, afirmó emocionado el jugador en una rueda de prensa ayer en el Centro de Entrenamiento del Corinthians.

Según la prensa deportiva brasileña, el Tottenham desembolsó 20 millones de euros (unos 26,1 millones de dólares) por los derechos deportivos del futbolista que, de acuerdo a esa información, también era pretendido por el Real Madrid, el Inter de Milán, el Mónaco y el Shakhtar Donetsk ucraniano.

El volante aseguró que regresará al Corinthians algún día en señal de agradecimiento por todo lo que hicieron por él.

El técnico del equipo brasileño, Adenor Bacchi Tite, quería que el jugador permaneciese por lo menos hasta la disputa de la Recopa Sudamericana ante el Sao Paulo, con partidos previstos para el 3 y 17 de julio en los estadios paulistas de Morumbí y Pacaembú respectivamente.

No voy a jugar porque el Tottenham hizo esa exigencia. Son cosas contractuales y no hay mucho para discutir. Es una decisión que respetamos, pero las ganas son enormes, explicó Paulinho.

El centrocampista de contención marcó 34 goles en 167 partidos disputados con el Corinthians, equipo al que llegó a mediados de 2010 proveniente del modesto Bragantino, que disputa el Campeonato Paulista y la segunda división nacional.