En la historia del fútbol mundial nunca se registró el peor tiro libre, pero esta vez, un jugador irlandés postula para este ‘antipremio’. El deportista amateur, que cobró la pena pitada por el árbitro, mandó a los cielos el balón con un disparo de poca categoría.
El deportista, que llevaba la camiseta número 4 en su espalda, decidió cobrar el tiro libre. Se paró como Cristiano Ronaldo frente a la pelota y disparó como el penal que cobró Sergio Ramos en la semifinal que disputó el Real Madrid contra el Bayern Múnich por la Champions League.
Sus compañeros solo atinaron a mirarlo y el jugador retrocedió con la cabeza gacha. Al menos reconoció su horror.