El Juez de Competición de la Federación Española de Fútbol (RFEF) ha sancionado con cinco partidos de suspensión al defensa del Real Madrid Sergio Ramos, que ayer fue expulsado del partido de vuelta de los octavos de final de la Copa del Rey que enfrentó a su equipo con el Celta.

Ramos ha recibido un partido de sanción por la expulsión y otros cuatro por los insultos al colegiado, ya que según el acta redactada por el árbitro del encuentro, Miguel Ángel Ayza Gámez, el jugador llamó “sinvergüenzas” a los colegiados tras ver la segunda tarjeta amarilla en el minuto 73.

“Sergio Ramos García, se dirigió a mi persona en los siguientes términos: ‘Eres un sinvergüenza’ repitiéndome esta frase tres veces, y ‘llevas todo el puto día jodiéndonos’ repitiendo esta misma frase dos veces’, señala el acta.

El colegiado añadió en su escrito que, “posteriormente y cuando llegó a la altura de los banquillos se dirigió a un árbitro asistente en los siguientes términos: Siempre igual, que sinvergüenzas son, repitiendo esta frase dos veces.