El escándalo que protagonizaron los jugadores de Godoy Cruz y Boca Juniors, que se trenzaron a golpes tras el empate 2-2 en Mendoza, por el torneo Inicial del fútbol argentino, generó hoy un amplio repudio de la prensa y el arrepentimiento de algunos de sus protagonistas.
“Fue una imagen triste. Se llega a esto por cómo vivimos y sentimos el fútbol, pero tenemos que tener tranquilidad, que esto no se desborde. Nosotros, los jugadores y los árbitros nos equivocamos. Todos somos un poco responsables, y hay que tener un margen de tranquilidad para que esto no se desborde”, reconoció el técnico de Godoy Cruz, Martín Palermo.
El entrenador ‘xeneize’, Carlos Bianchi, tomó en cambio otra actitud. “No vi nada, yo me quedé en mi lugar. ¿No podemos hablar de fútbol? Ustedes fueron los que vieron todo desde arriba. Tengo que ser sincero, ni vi el penal porque tenía la cabeza gacha”, aseguró.
Los desmanes estallaron luego de que Boca consiguió el empate en tiempo suplementario, sobre el final, con un penal cobrado por el árbitro Pedro Argañaraz y que convirtió Claudio Pérez. Según Palermo, ex histórico goleador de Boca, “el árbitro tuvo equivocaciones para los dos”, indicó.
Los jugadores de Boca Pablo Ledesma y Matías Caruzzo y los de Godoy Cruz Jorge Curbelo y Jonathan Ramis fueron informados por el árbitro Argañaraz, que serán parados al menos en la próxima fecha por su tarea en el estadio Malvinas Argentinas, informó la agencia de noticias oficial Télam.
Los cuatro futbolistas informados conocerán su sanción este jueves cuando se expida el Tribunal de Disciplina de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA).
RECHAZO TOTAL El escándalo generó fuerte repercusión en los medios, porque al trasladarse los incidentes también a las tribunas dejó en evidencia que Godoy Cruz permitió el ingreso de hinchas de Boca como “espectadores neutrales”, cuando actualmente las autoridades prohibieron la presencia de simpatizantes visitantes en los estadios.
“Piñas (golpes) para todos”, titula hoy el diario deportivo Olé en su primera plana, teñida de negro y en referencia al programa “Fútbol para todos” del gobierno nacional que permite la televisación abierta de todos los partidos de primera división a cambio de un multimillonario aporte a la Asociación del Fútbol Argentino (AFA).
“El arbitraje fue muy polémico. El ‘Loco’ Palermo fue el más cuerdo”, destaca Olé. “Boca empató sobre la hora en un final con escándalo”, remarca Clarín en su portada. El periódico advierte además que “la mentira de los neutrales se desnudó más que nunca” cuando “por la decisión peligrosa de Godoy Cruz, se mezclaron los hinchas y al final hubo golpes”. El club mendocino informó que se vendieron 8.000 entradas “neutrales”, que usaron espectadores que no ocultaron su afición por Boca al llevar camisetas, banderas y encender pirotecnia azul y oro.
El diario La Nación señala en tanto que “el fútbol argentino vivió otro bochorno en Mendoza; acaso el episodio con el que se cerró una semana virulenta, que incluyó el ‘apriete’ (amenaza) de los barras bravas de Huracán a su plantel; los ataques de los violentos de Colegiales en Vicente López; la trompada que Nelson Vivas, DT de Quilmes, le dio a un hincha de su propio club”. “Escándalos. Toda una costumbre”, concluye.