Los futbolistas del Bayern Múnich están felices de que haya terminado ya la fase de preparación para la final de la Champions League ante el Borussia Dortmund.
Ahora lo que todos queremos es llegar a Londres y jugar el partido, dijo hoy Bastian Schweinsteiger en Múnich, tras el último entrenamiento del campeón de la Bundesliga en la capital bávara.
Después de una temporada récord en Alemania y del balance de 11-0 en los últimos cuatro partidos de la Champions contra la Juventus de Turín (cuartos de final) y el decepcionante Barcelona (semifinales), el Bayern se ve en muy buena posición para vencer el sábado al Dormtund.
La fe en que obtendrán la corona del fútbol europeo parece inquebrantable. En esta temporada dimos un enorme paso hacia la perfección absoluta. Si jugamos con nuestro potencial, es muy, muy difícil ganarnos, dijo Schweinsteiger, jefe de medio del campo bávaro.
Depende solo de nosotros, tengo una sensación muy buena, manifestó el jugador de 28 años de edad dos días antes de la esperada final en el mítico estadio de Wembley. Día a día la tensión fue en aumento, admitió el centrocampista.
El portero del Bayern Manuel Neuer también reveló esa tensión en el vestuario bávaro: Vimos que incluso en los entrenamientos lo que todos quieren es ganar.
El equipo alemán partirá mañana por la mañana hacia Inglaterra con todos los jugadores en forma a excepción del internacional Holger Badstuber y Toni Kroos, ambos con lesiones leves.
El Bayern regresará a Múnich el domingo por la tarde. Y esperan hacerlo con un trofeo en sus manos. Espero que podamos hacer historia, dijo el defensa Dante antes de la primera final alemana en la primera clase del fútbol europeo.