Selección italiana: el futuro en los pies de Moise Kean

Obligada a terminar con el conservadurismo de un juego rácano que tuvo su punto más álgido en la eliminación de Rusia 2018, luego de 14 presencias mundialistas ininterrumpidas, soplan vientos de cambio en la ‘Squadra Azzurra’. Ha puesto su refundación en manos de Roberto Mancini, el técnico ganador de tres Scudettos con el Inter de Milán y una Premier League con el Manchester City que ha dado sobradas muestras de que lo intentará recurriendo a todos los jugadores posibles, sobre todo a esos jóvenes capaces de añadir el desparpajo inusual en un fútbol caracterizado por su rigidez táctica. En esa apuesta destaca Moise Kean, el depositario de la nueva esperanza italiana.

Con apenas 19 años, el delantero de padres marfileños ha jugado un rol protagónico en los dos últimos juegos de Italia en el arranque de la Eurocopa. El fin de semana se estrenó como titular ante Finlandia (2-0) y ayer repitió la tarea frente a Liechtenstein (6-0) con la misma eficacia: 90 minutos en la cancha y un gol para celebrar. Fueron dos cómodos rivales para empezar a darle rodaje a la nueva perla del país de la bota. Es verdad. Pero era necesario que el nivel de exigencia se vaya incrementando de a pocos para que pueda metabolizar su nuevo papel en la ‘Nazionale’. El plan con él es que no termine como su ídolo Balotelli, un talento descubierto a temprana edad que desperdició sus mejores años por no saber convivir con la fama, aunque por su físico y juego hace recordar mucho a ‘Súper Mario’.

La de Moise no deja de ser una apuesta osada de Mancini considerando que solo tiene un corto recorrido en la Serie A (26 partidos y 7 goles repartidos en cuatro temporadas, tres con la Juventus y una con Hellas Verona). Sin embargo, es una prematura aparición que ya goza de cierto reconocimiento por méritos propios: es el primer futbolista nacido en el siglo XXI que disputa un encuentro del Calcio y también en la Champions, además de ser el primero en marcar un tanto en una de las cinco grandes ligas de Europa. Podrían ser datos menores en el tiempo como pasa con muchas promesas incumplidas en un deporte que tiende a triturar las piernas de los talentos precoces. Pero en este momento nadie pone en duda su potencial: rápido, habilidoso, fuerte y con gol. Desde la banda, donde usualmente juega como extremo, o en el área rival va trazando su camino hacia el estrellato.

Muchos creen que su crecimiento podría verse frenado en la Juventus, donde arrebatarle minutos a Cristiano Ronaldo o a Mario Mandzukic es una tarea más que titánica. Los números lo confirman: 6 partidos (4 en la Serie A y 2 en la Champions) y 2 goles saben a poco para un crack en ciernes. Él lo toma con calma. “Solo puedo aprender de Cristiano”, explica Moise sabiendo que su momento tarde o temprano llegará.

“Él está destinado a la grandeza. Tiene mucho talento, pero estamos hablando de un chico de 19 años”, advierte Mancini, quien también fue uno de los mentores de Balotelli. Kean, en todo caso, sabe que puede verse en el espejo de su ídolo para todo lo bueno y todo lo malo.