Italia derrotó hoy por 4-3 a Japón en un partido loco en Recife y se clasificó junto a Brasil a las semifinales de la Copa Confederaciones. Pese a su gran actuación de hoy, Japón queda eliminada al igual que México, que horas antes perdió por 2-0 ante Brasil, quien se jugará el sábado la primera plaza del Grupo A ante el equipo ‘azzurro’.
Japón, muy superior durante la mayor parte del partido, se adelantó por 2-0, encajó tres goles entre el final del primer tiempo y el principio del segundo y revivió luego con el empate. Pero cuando todo parecía a su favor para el triunfo, Sebastian Giovinco anotó el tanto de la victoria italiana en el minuto 86.
Brasil e Italia ya están en semifinales con seis puntos cada uno y el sábado en Salvador pelearán por la primera plaza. México y Japón, sin puntos, están ya eliminados.
JAPÓN FUE UN KAMIKAZE Alberto Zaccheroni, técnico de Japón, había pedido en la víspera un equipo valiente y no tímido como contra Brasil, que lo derrotó con claridad por 3-0. Japón se dejó definitivamente la timidez en Brasilia. Tenía la pelota y era punzante en ataque ante una Italia desconcertada y errática que no se acercaba al arco de Eiji Kawashima.
En el minuto 20, una mala cesión de Mattia De Sciglio provocó que Buffon derribara a Shinji Okazaki en la disputa de la pelota. El penal, que el banquillo nipón vivió levantado y abrazado, lo anotó Honda. El estadio Arena Pernambuco, casi lleno, lo celebró como si Recife fuera Tokio.
La ‘torcida’ adoptó a Japón, al que coreó por momentos con gritos de olé, olé dado el dominio del juego y del balón. En la primera parte tuvo la posesión de pelota un 52 por ciento, un logro ante una Italia que presume de querer dictar en el rectángulo de juego.
En el minuto 33, un nuevo error defensivo lo aprovechó Kagawa para rematar de zurda una pelota suelta que no acertó a despejar la zaga italiana y poner el 2-0. Más malas noticias para Italia: Daniele de Rossi vio la tarjeta amarilla y se perderá el duelo del sábado ante Brasil.
ITALIA IMPUSO LA HISTORIA Los cambios de Prandelli no dieron frutos inmediatos y los olé, olé del público para Japón continuaban. Makoto Hasebe, de falta, volvió a desafiar a Buffon. De repente, de la nada, de un córner, Italia encontró un premio excesivo a sus méritos en los primeros 41 minutos de juego. Andrea Pirlo lanzó magistralmente desde la esquina y De Rossi remató de cabeza a las redes.
Despertó el subcampeón de Europa, que dominó el sprint final del primer tiempo. Giaccherini pudo lograr el empate, pero su disparo en el 45’ se fue al poste. En cinco minutos, Italia había hecho más que en todo resto del primer tiempo.
Ni la lluvia ni la pausa enfriaron a Italia, que prolongó esos minutos de furia ayudado por el cándido Maya Yoshida, quien se dejó ganar una pelota en la línea de fondo por Giaccherini, cuyo centro fue introducido en propia meta por Atsuto Uchida.
LA REMONTADA Inmediatamente después, un remate de Giovinco tocó en la mano de Hasebe mientras se caía y el árbitro argentino Diego Abal señaló un discutible penal que convirtió Balotelli en el 3-2. Italia le había dado la vuelta al partido en tiempo récord con un córner, un error defensivo y un polémico penal.
Japón no bajó los brazos y aprovechó el conformismo ‘azzurro’. En el minuto 69 Okazaki remató de cabeza una falta de Yasuhito Endo y empató de nuevo. Un slalom de Honda pudo adelantar a Japón, de nuevo desatado en ataque, pero lo evitó Buffon.
El partido era un divertido ida y vuelta. Ahora dominaba de nuevo el campeón de Asia, que en el 81’ tuvo un doble remate al poste y al larguero de Okazaki y Kagawa, respectivamente. Japón asediaba a una Italia que parecía muerta, pero De Rossi combinó con Marchisio, que cedió a Giovinco el tanto del triunfo ‘azzurro’ y de la eliminación nipona en una noche loca.