El ingreso al campo del fanático José Alberto López Aguilar, de 23 años, para reclamar al árbitro argentino Patricio Loustau, y los objetos lanzados desde la tribuna al juez fueron determinantes para que la FIFA haya castigado a Perú a jugar sin público el duelo ante Bolivia el 15 de octubre.
La FIFA decidió castigar a la FPF debido a los “graves incidentes por parte de los hinchas locales” en base al informe del juez argentino. Este ente, además, obligó a la FPF de “primer mundo” de Manuel Burga a pagar una multa de 22 mil dólares.
El 9 de setiembre el hincha que entró en el campo dijo en entrevista con elcomercio.pe que de darse una sanción “sería coronar una pésima gestión dirigencial”. Además aseguró no estar arrepentido de lo que hizo; por el contrario, dijo sentirse orgulloso.
“Yo he llegado señalándolo, diciéndole que era un ladrón, un vendido, que favoreció todo el partido a los uruguayos, que no cobró ninguna para Perú, que le rompieron la cabeza a (Paolo) Guerrero y no hizo nada. Parecía que había un guion. Yo le dije de todo, que no tiene sangre en la cara y escuchaba que la gente me alentaba y me respaldaba”, dijo en ese entonces.