Renzo Gómez Vega

En Cali, esa ciudad que palpita al compás de la salsa, , nuestro Melgar, impuso su ritmo y arrinconó al , en el partido de ida por los octavos de final de la .

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El empate a cero terminó con los locales pidiendo la hora, pues acabaron el partido, en Palmira, con nueve jugadores tras las expulsiones de Carlos Lucumí (86′) y Daniel Luna (89′).

Un resultado impensado en la previa, pero que debido al curso de los acontecimientos deja una sensación de insatisfacción e incluso de rabia. Hubo las suficientes oportunidades para marcharnos con un triunfazo histórico ante un rival deslucido que no es el que salió campeón a finales de 2021 ni tampoco el que le peleó de tú a tú a Boca Juniors y al Corinthians en la fase de grupos de la Libertadores.

El cotejo tenía un condimento especial: los colombianos verían a su flamante entrenador, el argentino Néstor Lorenzo, dirigiendo al equipo contrario. Si alguno duda les quedaba, ayer la disiparon ante el correcto planteamiento de los arequipeños que prácticamente no sufrieron sustos.

Melgar demostró, una vez más, por qué es la gran excepción del fútbol peruano y es capaz de pelear en los dos frentes (nacional e internacional) sin hacer el ridículo ni poner excusas de por medio.

Todo lo contrario: ayer sin Bernardo Cuesta, su goleador histórico, los mistianos se las ingeniaron para causarle estragos a la escuadra azucarera. Aunque es cierto que si el argentino más querido de Arequipa hubiese estado presente, seguramente habrían liquidado la llave. Luis Iberico se comió un par de goles, olvidándose que alguna vez fue centrodelantero.

Destacable el trabajo del mediocampo: un tridente compuesto por jugadores trajinadores, que también saben con la pelota: Orzán, Tandazo y el ‘Chaca’ Arias. Este último la figura del partido. Desdoble, quite, y juego. Arriba, sin Cuesta como referencia de ataque, Pérez Guedes se plantó en su lugar para distraer a los colombianos, y desde allí distribuir y asistir. El ‘9′ más falso de los últimos tiempos.

Cristian Bordacahar rechaza un balón en el área mistiana. Sumó más en defensa que en ataque esta vez. (Photo by Juan BARRETO / AFP)
Cristian Bordacahar rechaza un balón en el área mistiana. Sumó más en defensa que en ataque esta vez. (Photo by Juan BARRETO / AFP)
/ JUAN BARRETO

En la otra acera, Dudamel, el entrenador del Cali, el mismo que unos cuantos sabiondos introdujeron en la baraja para reemplazar a Ricardo Gareca ante una eventual renuncia, nunca supo cómo contrarrestrar la pizarra de Néstor Lorenzo. ‘Teo’ Gutiérrez, sin pólvora a sus 37 años, fungió de diez y de capitán. Pero la cruda verdad es que no pudo organizar ni liderar.

Los cambios resultaron malditos para el Deportivo Cali: Lucumí ingresó por Rodríguez a los 71′ y quince minutos después fue expulsado. Caso similar al de Luna: entró a los 79′ por ‘Teo’ Gutiérrez y le enseñaron la roja a los diez minutos. Quedaron cortos los seis minutos que dio el árbitro en los descuentos para lo que se paralizó por la intromisión del VAR.

Sea como fuere, este miércoles 6 Melgar tiene la inmejorable ventaja de clasificar a los cuartos de final de la Sudamericana. Algo que no consigue un equipo no limeño desde hace ocho años. El último equipo, allá por el 2014, fue la Universidad César Vallejo. Este domingo, además, a Melgar le alcanzará con el empate ante Alianza Atlético, en Sullana, para conquistar el Torneo Apertura. La gloria dependerá de esos tres días. A mantener la entereza.