A mediados del 2012 la administración temporal (AT) tomó las riendas de Universitario de Deportes y se sentó a renegociar los contratos con cada uno de sus patrocinadores, excepto con Backus. Rocío Chávez, la presidenta (AT), señaló que intentaron entablar un acuerdo, pero no hubo resultados hasta ni para la campaña 2013.

Ayar López Cano, directivo de Universitario, advirtió que el conflicto con Backus podría terminar con la relación comercial entre ambos, ya que “no le es conveniente al equipo”. “El tema deportivo se ha cruzado con el económico”, dijo el directivo a Gestión.

López recordó que antes de que acabara el Descentralizado, Christofer Gonzáles fue sancionado por la Comisión de Justicia de la Asociación Deportiva de Fútbol y suspendido una fecha por un incidente con Gustavo Victoria de Inti Gas. El volante crema le devolvió un escupitajo al colombiano.

Pero, José Luis Noriega, presidente de la Comisión de Justicia de la Federación Peruana de Fútbol, intervino y afirmó que la suspensión debió ser de seis fechas. Sorprendentemente, al día siguiente Sporting Cristal apeló y pidió la máxima sanción al jugador de Universitario de Deportes.

“Fue una sorpresa para nosotros, porque Cristal no era parte involucrada en el caso. Eso fue la gota que derramó el vaso”, explicó López. Al final, y ante la intervención de la “U”, el club rimense retiró la apelación. Por el caso, Universitario envió una carta notarial a la propia Backus. Conflicto.

CONFLICTO DE INTERESES “Backus junto a Sporting Cristal pertenecen a un solo grupo económico que es SABMiller, son dos hermanos que se rigen bajo el mismo código de ética, en el que se señala que no debe haber conflictos de intereses entre las empresas y todos los terceros vinculados a ellas. En ese caso está la U”, aseveró Roció Chávez.

Chávez agregó que no entiende cómo si Backus es el sponsor del equipo desde hace ocho años, actúa en contra de los intereses de la ‘U’. La presidenta sostiene que no pueden tener un auspiciador que atente contra el club. “Un club de fútbol, que juega en el campeonato, no puede tener como sponsor a una empresa que al mismo tiempo es propietaria de un club que juega en contra de ti. Hay un conflicto de intereses terrible”, enfatizó Chávez.

ARBITRAJE Y NUEVO CONTRATO El contrato con Backus es por un monto anual de US$ 250 mil y en una de sus cláusulas dice que ante cualquier conflicto, las partes podrán acudir a un arbitraje. Para Rocío Chávez, hay un problema y es el conflicto de intereses que existe, lo que ha provocado que el sponsor no dé un apoyo absoluto al club. “El contrato no se estaría cumpliendo, pero ellos dicen que sí. Tenemos un conflicto”.

Universitario de Deportes ya nombró a Óscar Vidal como árbitro y Backus a Eduardo Roy Freire. Ahora ambos deberán elegir a un tercero. Ambos dirigentes, Chávez y López, coinciden en que en más de una oportunidad Backus prometió que renegociarían las condiciones del contrato. Chávez remarcó que se respetará el mismo, que vence en diciembre del 2014.

El acuerdo implica, además, que la “U” está obligada de comunicar a la Backus si hay interés de otra compañía por ser un sponsor. “Pensamos que no podemos seguir con un auspiciador de este tipo que nos maltrata”, afirmó Chávez.

“Cómo renegociar mejores condiciones con alguien que tiene conflictos de intereses, lo mejor que podría pasar es que termine el contrato (…) El tema no parte por renegociar el contrato, sino que termine este y empezar otro nuevo o que llegue otro auspiciador. No olvidemos que existe conflicto de intereses, que esto constituye abuso del derecho”, detalló Rocío Chávez.

López sostuvo que en Backus le han manifestado “que en el futuro van a separar totalmente a Sporting Cristal de la compañía, incluso con un cambio de nombre para que no tenga vinculación con SAB Miller”. “Con ello romperían el principio del conflicto de intereses”.

DEUDA CONCURSAL Durante cuatro meses directivos de Backus y de la administración temporal (AT) de Universitario se sentaron a discutir por el pago o no de US$ 150 mil de parte de la cervecera al club crema.

La historia comienza cuando la compañía le adelantó dicho monto a la administración anterior de la “U”. Se trataba de un pago como parte de los US$ 250 mil anuales que da Backus a la Universitario como sponsor, señalÓ Ayar López.

Cuando la AT ingresa al club, pide a Backus pagar los US$ 150 mil, pues estos debían pasar a ser parte de la deuda concursal. “No fue un préstamos como sí sucedió con Telefónica”, añadió el directivo.

Al ser una deuda concursal, la “U” tendrá que pagarla, pero estará en el cronograma de pago de acreencias que se fijará con Indecopi, recordó Rocío Chávez. Finalmente, Backus admitió que sí debía pagar. “Pero ya pasó más de un año y no nos pagan”, señaló López.

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Contenido de El Comercio Perú