Más allá del enrroque nocturno de ayer, donde Carlos Sainz tomó la punta por la decisión de la organización, Stephane Peterhansel sabía que, tras lo mostrado en la arena, el liderato era cuestión de kilómetros. Y así ocurrió: por más que Nasser Al-Attiyah ganó el tramo y que Robby Gordon hizo el segundo mejor tiempo, el crono logrado por el francés ha sido el necesario para tomar la punta con una ventaja de 6 minutos y 33 segundos sobre el catarí.

Otro hermosa especial, atacando, justo lo que necesitábamos, sin ningún error de navegación gracias a Jean-Paul. Cuando nos hemos dado cuenta que Carlos ya no estaba en la ruta caímos en la cuenta que teníamos que rodar con velocidad pero con más cuidado”, admitió Peterhansel, que ahora si puede jactarse de haber ganado su etapa número 60 en el raid.

¿Y Sainz? Sufrió con el motor de su buggy por culpa de un problema eléctrico. Ha sido difícil pasar por los primeros cordones de dunas con un motor sin potencia. Además, la cosa ha ido empeorando a lo largo de la mañana y, al final, el coche se ha parado”, comentó el Sainz sobre lo vivido. Cuando parecía que el problema estaba superado este reapareció, motivo por el cual los últimos 60 kilómetros han sido un verdadero suplicio para el madrileño que empezó el día liderando y hoy se encuentra quinto, a 21 minuto de la punta.

Mención especial merece hoy el argentino Lucio Álvarez que terminó cuarto en la etapa y ha visto cómo su regularidad en la prueba se ha consolidado con el tercer lugar de la general de la división de camionetas.

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