Tras el enfrentamiento a 10 asaltos en el T-Mobile Arena de Las Vegas, Floyd Mayweather y Conor McGregor se reencontraron en una rueda de prensa muy particular.
Mayweather asistió a la cita del sábado último muy deportivo, vestido totalmente de negro con dorado, fiel a su estilo. Por su parte, McGregor lució muy elegante, vistió de traje y lentes oscuros.
Lo más resaltante fue que pese a perder la pelea por nocaut técnico, McGregor llegó muy sonriente, con una botella de whisky que tenía su propio sobrenombre "The Notorius". Incluso, se animó a brindar para las cámaras de la prensa mundial.
Ambos deportistas posaron para las fotos, y se percibió muy buena química. Toda la rivalidad quedó en la previa y el cuadrilátero. Fue un negocio redondo para ambos y un gran espectáculo para las millones de personas que disfrutaron de la pelea a nivel mundial.