El mototaxi quedó muy relegado en la pista de unos 80 metros en la cuadra 7 del Malecón Cisneros en Mirafl ores. El vehículo, tan típico en nuestro país, fue nombrado “Forever Faster”, pero no aceleró. (Foto: Alessandro Currarino)
El mototaxi quedó muy relegado en la pista de unos 80 metros en la cuadra 7 del Malecón Cisneros en Mirafl ores. El vehículo, tan típico en nuestro país, fue nombrado “Forever Faster”, pero no aceleró. (Foto: Alessandro Currarino)
Miguel Villegas

Aunque los stickers-pastillas-para-la-moral (“Mi envidia es tu progreso”), las luces psicodélicas (rojas y amarillas) y los parlantes de minicomponente adaptados al lado del piloto son más bien creatividad nacional, es difícil adjudicarle paternidad absoluta del mototaxi al Perú. Mototaxis hay en todos lados: las Virgin Limobikes de Londres, las moto avispas de París y las veloces máquinas que dominan Iquitos.

Uno de estos modelos escarabajo está aquí, estacionado en el Malecón Cisneros de Miraflores y, como si se tratara de un torito de Pucará o un tumi Chimu, todos se quieren sacar una foto con él: en breve va a competir con , el hombre más rápido del planeta.

Usain Bolt. (Foto: Alessandro Currarino)
Usain Bolt. (Foto: Alessandro Currarino)

Bautizada “Forever Faster” en el frontis, con dos banderas del Perú a los costados y ambientada con los colores amarillo y rojo del fuego –o del rayo–, el mototaxi descansa mientras Miguel Poma, el piloto que vive en San Juan de Lurigancho, chatea por su celular: la hazaña de competir con Bolt merece que se suba a su Instagram storie.

—Espectáculo—

Bolt llega al Malecón Cisneros en una camioneta y custodiado por otra. Es ovacionado por los más de mil fanáticos que han llegado a esta zona de Miraflores para ver al hombre que corría 100 metros en poco más de 9 segundos. Usain calentó al lado del vehículo representativo del Perú. Escuchó el conteo hasta tres y comenzó la carrera. No fueron 100 metros, pero valió la pena ver cómo dejaba atrás al mototaxi y trotando, encima.

Con unas cuántas zancadas, Bolt hizo vibrar al público peruano que nunca tuvo la oportunidad de verlo de cerca en las competencias más importantes del mundo. Recibió una bandera peruana, celebró como el ‘Rayo’ y recibió todo tipo de regalos. Saludó a la gente, se acercó y sonrió en todo momento. Usain, más allá de su capacidad para avanzar de un lado a otro en muy poco tiempo, se portó como en cada una de sus carreras: como un niño al que le encanta correr.

“Estoy muy agradecido a todos los que vinieron a verme. Sentí mucho cariño en el Perú”.

—Actividades—

Le queda un día al ‘Hijo del Viento’ en Lima. Esta mañana estará en la nueva pista atlética de la Videna donde dejará sus huellas como recuerdo histórico de su visita. Por la noche, regalará camisetas autografiadas en el Jockey Club.

Bolt le ha ganado a un mototaxi. La máquina de la velocidad sigue siendo él.

Como jugando

- La carrera no duró más de doce segundos, pese a que Bolt corrió a un paso pausado.

Usain incluso se atrevió a manejar el vehículo tras la prueba y luego saludó al público presente.

Contenido sugerido

Contenido GEC