Nasser Al-Attiyah sabe que en estos momentos es el único que puede arrebatarle el título del Dakar a Peterhansel, por eso está esperando el momento para ir por el primer lugar. La diferencia es de tres minutos y 14 segundos, aunque el catarí lo está tomando con calma.

No tomo ningún riesgo. Trato de mantener el coche y acabar sin problemas, así pierda algo de tiempo”, afirmó el piloto, aunque lanzó el reto. Estoy esperando mi momento. Un día, fuera de pista, atacaremos y podemos ponernos en cabeza, señaló a la agencia EFE.

Nasser estaría esperando un terreno más suave donde atacar, quizás el desierto de Fiambalá o las dunas de Copiapó, en Chile.

El príncipe catarí corre en su propio vehículo, y está satisfecho por lo que ha mostrado hasta ahora. Es bonito tener tu propio equipo, no un coche alquilado. Entre Nasser y Sainz, con el otro buggy, han ganado cinco de las siete etapas de este Dakar, aunque el piloto español terminó dejando la prueba por problemas mecánicos.

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