El peruano Felipe Málaga quedó en segundo lugar en la última fecha del sudamericano de downhill y con ello logró el título del circuito en la categoría Open Pro, pero una injusta decisión de las autoridades le podría quitar el campeonato. Málaga fue sancionado por poner el brazo para no caerse luego de que el brasileño Douglas Dalua lo obstruyera en una curva.

“Me descalificaron de manera muy injusta. La decisión del representante IGSA el también brasileño Alexander Maia es que yo quedaba en cuarto lugar y Douglas Dalua segundo. Nosotros le hemos enviado al presidente de la IGSA el estadounidense Marcus Rietema toda la información para que reconsidere el fallo”, dijo Málaga, quien ha recibido el apoyo de otros deportistas nacionales y extranjeros que consideran que no cometió falta alguna.

Pese a que el reglamento de la IGSA (International Gravity Sports Association) autoriza que un deportista se proteja con el brazo en caso de riesgo de caída, el peruano fue sancionado y ubicado en la cuarta posición de su serie, mientras que Dalua fue ubicado en segundo lugar. Con este fallo Málaga perdería el título, el mismo que pasaría a manos del brasileño.

“Yo, en la última curva, entro por dentro en un espacio que ya tengo, por lo que poseo el derecho de línea. Dalua me comienza a tirar hacia la tierra con su hombro, no sé si de manera intencional o no, y lo que yo hago es poner el brazo para no caer a la tierra. Él alega que porque yo pongo el brazo debo quedar eliminado, pero el reglamento dice que lo puedes poner en caso de situaciones extremas”, añade el peruano, quien espera que en la IGSA reconozcan el error.

Además de Málaga, otros dos peruanos obtuvieron una destacada actuación en el sudamericano de downhill: Gustavo Paredes obtuvo el subcampeonato en la categoría Open y Mariza Núñez hizo lo propio en Mujeres.