Abrumado, el mundo del tenis ya no acierta a encontrar adjetivos para describir la hazaña del español Rafael Nadal en el Abierto de Francia. Quizás entonces nadie mejor que el propio jugador para recordar cada uno de sus ocho títulos en Roland Garros.
Si en el primer título, aquel de 2005, sentía que podía correr tres días seguidos de tanta adrenalina que acumulaba, el de 2013, el más frío que recuerda, fue también el más especial tras siete meses de ausencia del circuito por una doble lesión de rodilla.
Estos son, desmenuzados por Nadal en diálogo con la agencia dpa, los históricos ocho títulos en Roland Garros del español, así como el recuerdo de su único tropiezo en el Bois de Boulogne, donde acumula 59 partidos ganados y sólo una derrota:
2005 (19 años), primer título con una victoria de 6-7 (6-8), 6-3, 6-1 y 7-5 sobre el argentino Mariano Puerta, 37 del ranking mundial, en la final: Fue emocionante. No creo que jugase a mi mejor nivel, pero fue emocionante. Sentía que podía correr tres días seguidos, solo de la adrenalina que llevaba dentro.
2006 (20 años), segundo título con una victoria de 1-6, 6-1, 6-4 y 7-6 (7-4) sobre el suizo Roger Federer, número uno del mundo, en la final: Fue también muy emocionante, porque venía de la que quizás fue la lesión más complicada que haya tenido en toda mi carrera, la lesión en el pie. No sabía si podría volver a jugar al tenis. Volver a ganar ahí fue algo increíble.
2007 (21 años), tercer título con una victoria de 6-3, 4-6, 6-3 y 6-4 sobre Federer, número uno del mundo, en la final: La verdad que es la final de la que tengo menos recuerdos de todas.
2008 (22 años), cuarto título con una victoria de 6-1, 6-3 y 6-0 sobre Federer, número uno del mundo, en la final: Es el mejor tenis que haya jugado prácticamente nunca en tierra.
2009 (23 años), derrota en octavos de final por 6-2, 6-7 (2-7), 6-4 y 7-6 (7-2) ante el sueco Robin Soderling, 25 del ranking mundial: Venía de un año complicado, estaba mal de las rodillas, no estaba jugando al mejor nivel, los problemas en las rodillas me iban haciendo bajar el nivel. Con todo lo que había pasado no estaba preparado ni tenística ni mentalmente como para poder competir. Me encontré con un jugador que jugó muy bien y me ganó limpiamente. Mereció ganar el partido mucho más que yo.
2010 (24 años), quinto título con una victoria de 6-4, 6-2 y 6-4 sobre Soderling, séptimo del ránking mundial, en la final: Después de un 2009 que fue un año realmente complicado, difícil por todo lo que pasó, 2010 era el año, el año para volver a ganar. Al conseguirlo sentí no alivio, pero sí una sensación de felicidad muy grande.
2011 (25 años), sexto título con una victoria de 7-5, 7-6 (7-3), 5-7 y 6-1 sobre Federer, tercero del ranking mundial, en la final: Estaba siendo un año difícil. Había perdido muchas finales, pero las había perdido con Djokovic, no con Federer. Quizás es junto con el de 2009 el Roland Garros más complicado que jugué.
2012 (26 años), séptimo título con una victoria de 6-4, 6-3, 2-6 y 7-5 sobre Djokovic, número uno del mundo, en la final: En 2012 estaba jugando muy bien. Gané todos los partidos creo que sin perder un set hasta la final, ¿no? La final iba por muy, muy buen camino y se complicó mucho con la lluvia. Después de haber perdido tres finales de Grand Slam seguidas contra Djokovic, era un partido que realmente me llenaba.
2013 (27 años), octavo título con una victoria de 6-3, 6-2 y 6-3 sobre el español David Ferrer, número cinco del mundo, en la final: El Roland Garros más frío que hemos tenido. Venía haciéndolo mejor en los torneos previos, pero cuando he necesitado jugar al mejor nivel, lo he hecho. He aceptado en todo momento las adversidades y es muy especial viniendo de dónde vengo (siete meses de ausencia del circuito por una doble lesión de rodilla). Solo puedo decirle gracias a la vida por haberme dado esta oportunidad.