DAVID HIDALGO JIMÉNEZ @DavidsCreator
Alicia Valdelomar Rodríguez atiende nuestra llamada con gran amabilidad y con la felicidad de una madre a la que le cambió la vida esta semana. El discurso que ofreció su hijo en Canadá ante los miembros de la Odepa está en boca de todos. “No se imagina lo que ha significado para nosotros, es realmente un orgullo”, dijo la mamá de Renzo Cárdenas a elcomercio.pe.
La señora nos reveló algunas facetas interesantes del taekwondista de 14 años que colaboró para que Lima sea elegida como sede de los Panamericanos 2019. “Renzo jugó desde el 2009 en Alianza Lima. Allí estuvo dos años como delantero en menores, pero no pudo seguir porque le exigían que pague, por eso lo tuve que sacar. Felizmente, una amiga me pasó la voz para que juegue en el club Esther Grande de Bentín y en el 2011 lo inscribí. Uno de sus profesores es Marco Valencia”, explicó la orgullosa Alicia.
Un día normal en la trajinada semana de Renzo comienza a las 5 a.m. Una hora después inicia sus entrenamientos de taekwondo en la Videna de San Luis hasta las 7:30 a.m. Luego asiste al Centro Educativo Deportivo Experimental (CEDE) en la Av. 28 de julio en La Victoria. A la 1:30 p.m. vuelve a casa para tomar un almuerzo rápido y desde las 3 p.m. entrena en el club Esther Grande de Bentín (EGB) en Lurín. A las 6 p.m. regresa a su vivienda, aún con energías, para hacer sus tareas.
Más de una vez se le ha cruzado un torneo de taekwondo con un partido de campeonato con el EGB. “Es un martirio, pero tengo que apoyar a mi hijo. A veces ha jugado un partido en un distrito y con las mismas se ha tenido que ir a luchar en otro”. Renzo vive en El Porvenir, en La Victoria.
“Él dice que quiere ser chef, y ahora que regresó de Canadá ha venido encantado de la buena comida. Uno quisiera darle de todo a sus hijos, pero somos de bajos recursos y sería bacán que por sus logros deportivos pueda tener la gran posibilidad de estudiar una carrera aquí o en el extranjero”, concluyó doña Alicia, quien tiene en casa a un chico que es un ejemplo a seguir.