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La carrera de un deportista puede tener muchas etapas curiosas, y Roger Federer vivió una de ellas hoy en el torneo de tenis de Gstaad, Suiza. Los organizadores del campeonato suizo que se inició el 20 de julio le regalaron una hermosa vaca color castaño llamada Desirée.
El tenista suizo, que debutará ante Daniel Brands, se mostró nervioso cuando se encontraba al lado del bello animal que ingresó a la cancha de tenis anunciando su entrada con una campana que llevaba colgada en el cuello y con un llamativo arreglo de flores amarillas en la cabeza.
Ahora tengo que encontrar un garaje para la vaca, aunque no tengo ni idea de lo que es un garaje de vaca, dijo riendo Federer a los organizadores del evento.
En el 2003, también en Gstaad, Federer había recibido una vaca de regalo llamada Juliette. El animal tuvo que ser sacrificado porque no producía suficiente leche.
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