CHRISTIAN CRUZ V. @cruzva_DT
Hay que aprender para ser como Natalia, dice convencida de que el vóley es su pasión y más cuando se tiene que poner la camiseta blanquirroja. Vivian Baella nuevamente tendrá el escudo en el pecho, esta vez para el vóley playa de los Juegos Bolivarianos. Ella lleva dos años practicando este deporte de duplas y con Sandra Chumacero apuntan a una medalla en el torneo.
¿Cómo te va en esta experiencia del vóley playa? Vengo dos años practicando esta disciplina, pero es por temporadas. Yo sigo jugando el vóley piso en Alianza Lima. En el vóley playa ahora estamos entrenando desde agosto con miras a los Juegos Bolivarianos. Me gustan ambas y me entrego al máximo siempre.
¿Cómo sientes que llegan a los Bolivarianos? Estamos entrenando hace dos meses. La verdad, cualquiera de las duplas estamos en condiciones de sacar alguna medalla. Mi dupla es Sandra Chumacero y estamos limando nuestras debilidades para poder llegar lejos.
¿Ya han jugado juntas? Claro, jugué el Mundial de Vóley Playa en Canadá el año pasado, pero ahí recién nos estábamos iniciando. En los Bolivarianos de Playa, estuve con Marisol Mendoza y quedamos cerca de ‘semis’. Me queda esa espina y espero sacármela en estos Bolivarianos.
¿En cuál disciplina te sientes más cómoda? Me gusta el vóley playa porque siempre tienes contacto con la pelota. Tienes el poder de decisión de cómo hacer el punto, a diferencia del vóley piso en el que en algunas jugadas no llegas a tocar la pelota.
¿Es mucha la diferencia con el vóley piso? Requiere más fuerza, por la arena, y también mucha maña. Como solo son dos jugadoras, a veces las colocadas son más necesarias que la potencia. También disfruto jugar el vóley piso, me encantan ambos.
Entonces seguiremos viéndote en la Liga Nacional… Claro. También ahí tenemos que sacarnos el clavo. Ya son dos años que Alianza queda cuarta y este año tiene que darse.
¿Qué te generó ver a la selección abandonando el campo en el Premundial? Fue decepcionante ver cómo terminó el campeonato. Ahora solo queda remediar errores y seguir para adelante.
Estuviste convocada. ¿Qué pasó, por qué no seguiste? Estuve en una convocatoria, pero en ese momento decidí priorizar mis estudios. Si hubiera seguido quizá regresaba a la universidad. Es una gran responsabilidad pertenecer a la selección, y hay que dedicarle mucho tiempo.
¿Tu deseo es estar? Claro, a quién no le gustaría representar al Perú. Por suerte yo también lo voy a hacer en el vóley playa en los Bolivarianos, así que es la misma sensación.
¿Cómo crees que le irá a la selección mayor con Natalia Málaga como entrenadora? Se veía venir lo de Natalia después de los resultados con el coreano [Sung Jin Hong]. Esperemos que dé un buen espectáculo, y seguro así será. Conozco a Natalia porque fue mi entrenadora y es una gran persona fuera y dentro. Exige mucho y como ella ha jugado sabe lo que uno siente y cómo sobrellevarlo.
¿Sigues en la universidad? Estudio Administración de Empresas y estoy en quinto ciclo. Me retrasé bastante por el vóley, pero lo estoy retomando. Soy buena estudiante, ¡eh! Quiero ser profesional en el vóley y en mi carrera. Además, enseño vóley en el Country Club Villa, esto para generarme algunos recursos propios.