Diloo, la ‘app’ peruana de delivery, se medirá con todo ante la española Glovo y ante Uber Eats, que ya anuncia su ingreso al mercado peruano.
Para ello, Diloo está ampliando sus propuestas y verticales de negocios. En reparto de comida, selló hace tres semanas un contrato para delivery de Panchita, del grupo Acurio, y en unos días empezará a repartir también para Papachos y Barra Chalaca. Más adelante, seguirá Tanta, cuenta José Ignacio Bernal, director de la startup.
Además, ya realizan repartos para marcas del grupo Civitano como Juicy Lucy. “No apuntamos solo a las fast food clásicas. Buscamos opciones culinarias de valor y calidad”, comenta.
A la par, esta semana afinan detalles para empezar a repartir listas de compras para Vivanda y Plaza Vea.
A fin de mes, cerrarán su segunda ronda de inversión, en la que esperan levantar US$300 mil. Ello se destinará para publicidad y mejorar su tecnología. También han sumado a Sharff como socio logístico.
Al cierre del año apuntan a atender 50 mil pedidos por mes y a una flota de 150 motos.