El rostro empresarial del Perú, por Gonzalo Carranza

Uno de los Líderes Empresariales del Cambio 2018 es Humberto Martínez, presidente ejecutivo de Inmobiliaria y Constructora Marcan. Apenas terminada la ceremonia de premiación, Martínez escribió un ‘post’ en su cuenta de Facebook. Me impresionó su texto y le pedí compartirlo en esta columna.

“Hoy [3 de abril] se cumplen 35 años de la masacre de Lucanamarca. Hoy, por coincidencia, fue la premiación de los LEC, que promueven EY, El Comercio y Asbanc. Tuve la suerte de ser invitado a participar y fui testigo, hoy, del reconocimiento a dos personas premiadas como líderes. Premiaron a varios, pero estas dos fueron las historias que más me llamaron la atención.

La primera es la de Dora Rodríguez, una mujer que a los 14 años huyó del terrorismo de Sendero Luminoso con su familia, desde Huanta, Ayacucho. Vino a Lima y luchó trabajando en todo lo que pudo: fue cambista, vendedora de helados y otros trabajos.

Distribuyendo helados, trabajando sin parar, llegó a superar la capacidad de la empresa que la abastecía y la absorbió. Hoy tiene la marca Yámboli y es líder en el interior del Perú. Una mujer luchadora que derramaba lágrimas al recibir el premio, pues sabía que había vencido a la pobreza, a la discriminación por ser una mujer ayacuchana en Lima y, sobre todo, había vencido a Sendero sin armas, a punta de esfuerzo.

La segunda persona es Teodoro Ortiz, fundador y dueño de Incasur, que tiene las marcas Kiwigen y Sol del Cusco, entre otras marcas. Un cusqueño que venció a todos, especialmente a la discriminación por ser provinciano y por tener el rostro quemado desde niño, que sacó lo mejor de su tierra y hoy es el principal impulsor de la quinua, la kiwicha, la mashua, entre otros productos andinos.

Este señor de 73 años, que fue el ganador absoluto de los premios LEC de este año, y que cerró con un discurso emotivo en quechua, también venció a Sendero.

35 años después de la matanza de Lucanamarca, dos peruanos luchadores nos recordaron lo equivocados que estaban los de Sendero Luminoso. Las claves para salir de la pobreza están en el esfuerzo, el trabajo, la innovación y, sobre todo, en la perseverancia. Qué lujo haber conocido estas dos historias de emprendimiento y coraje”.

El concepto de empresario se ha vuelto un estereotipo muy lejano a nuestros 30 LEC del 2018. En realidad, tenemos empresarios exitosos de diversas edades, géneros, historias, orígenes y oportunidades, unidos todos por la misma perseverancia, resiliencia, creatividad y saludable ambición.

Y tenemos empresarios como Humberto Martínez, que a la visión de futuro le suman una imprescindible dosis de memoria.