MEF usará este año ahorro fiscal para la reconstrucción

En diciembre del año pasado los ahorros fiscales se redujeron en US$4 mil millones. La mitad de esos recursos salió del Fondo de Estabilización Fiscal (FEF), pero esos recursos no han sido utilizados para financiar el déficit público del 2017, sino que se destinarán a las obras de reconstrucción del norte del país, según el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).

El director de Política Macroeconómica del MEF, Carlos Montoro, explicó que ese dinero será ejecutado en los próximos meses. Para ello, indicó que se cambiaron esos recursos a soles ante la expectativa de que el tipo de cambio continúe a la baja.

“El FEF se va a usar en el transcurso del año. Se han autorizado alrededor de S/7 mil millones para la reconstrucción, entonces se van a ir ejecutando. Los otros S/2 mil millones tampoco se han usado todavía, pero se van a usar en los próximos meses”, sostuvo.

En ese sentido, agregó que el uso del FEF no solamente se dará durante el 2018, sino también en los próximos años y hacia el 2021.
“El fenómeno de El Niño gatilló la cláusula de excepción en la Ley 30637, que habilita la posibilidad de uso del FEF desde la entrada en vigencia de esta ley hasta el 2021. Pero hasta ahora solo se ha usado el retiro”, anotó.

LA TRAYECTORIA
A pesar del retiro de estos US$4 mil millones, los ahorros del fisco se han reducido a un ritmo relativamente lento. Según cifras del Banco Central de Reserva, a finales del 2017 había un saldo de US$9.349 millones de ahorro fiscal en las reservas internacionales netas.

Asimismo, los depósitos del sector público en el sistema financiero ascienden a US$22.486 millones. La suma de ambos es un 6% inferior al saldo que había a finales del 2016 y persiste en 10,6% del PBI.

Usar el dinero de los ahorros es algo que, como estrategia financiera, es más barato que emitir nueva deuda, anotó Carlos Oliva, director de la Maestría en Gestión Pública de la Universidad del Pacífico.

Sin embargo, advierte que, de cara al mediano plazo, estamos en una inercia de déficit público que no está generando nada productivo, como nueva infraestructura.

Agrega que seguir utilizando los ahorros haría que la deuda pública neta se incremente, lo cual podría impactar en la calificación crediticia del país.

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