(Foto: Reuters/Lucas Jackson)
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Agencia Reuters

Las subían el martes en las primeras operaciones, en momentos en que los inversores hacían caso omiso a las tensiones geopolíticas para concentrarse en los movimientos corporativos tras la fusión de Aveva con Schneider Electric.

Los valores financieros y de salud respaldaban los avances. El índice paneuropeo STOXX 600 ganaba un 0,2%, recuperándose después de que el lunes cortó una racha de tres días de avances consecutivos luego de que Corea del Norte realizó el domingo su sexta y más poderosa prueba nuclear a la fecha.

Los valores principales de la zona euro subían un 0,3%.

El índice británico FTSE 100 avanzaba un 0,3% y el alemán DAX sumaba un 0,4%.

Los valores bancarios eran los que más contribuían a las alzas, recuperándose después de un arranque de la semana marcado por la aversión al riesgo. El sector de materias primas era el de mayores ganancias.

Las acciones del sector de salud también ayudaban a impulsar las subidas, lideradas por la alemana Merck KGAA, que dijo que está considerando vender su negocio de productos de cuidado al consumidor.

Las acciones de mediana capitalización británicas ganaban un 0,4% después de que los papeles de la firma de software de ingeniería británica Aveva saltaron más de un 24%.

Aveva acordó combinar con Schneider Electric su negocio de software, creando una empresa cotizada en Londres por valor de más de 3.000 millones de libras esterlinas.

Los títulos de Schneider Electric avanzaban un 1%.

EN ASIA
El índice Nikkei de la bolsa de Tokio cayó el martes a un mínimo en una semana durante una sesión volátil, luego de que las tensiones en la Península Coreana socavaron el apetito por el riesgo.

El Nikkei restó un 0,6% para cerrar en 19.385,81 puntos después abrir con unas ganancias iniciales. El referencial llegó a ceder hasta 19.354,59 unidades, su nivel más bajo desde el 29 de agosto.

“El mayor factor que pesa sobre el mercado ahora parece ser la incertidumbre sobre Corea del Norte, y los inversores esperan a ver lo que sucede después”, dijo Yutaka Miura, analista técnico senior de Mizuho Securities.

“Sin ninguna manera de saber si la situación se agravará o no, muchos inversores piensan que es un buen momento para recoger ganancias”, agregó.

Por su parte, las acciones chinas avanzaron por tercera sesión consecutiva a máximos de 20 meses, sin ser afectadas por las tensiones sobre Corea del Norte y reforzadas por las expectativas de que el crecimiento económico permanecerá sólido hasta fines de año.

Los inversores también esperan que se anuncien más reformas después de un Congreso del Partido Comunista que comienza a mediados de octubre.

La reunión incluirá una importante reorganización del liderazgo del partido y establecerá los planes y prioridades económicas de Pekín para los próximos cinco años.

El referencial CSI300 de las principales acciones que cotizan en Shanghái y Shenzhen subió un 0,3%, a 3,857.05 puntos, mientras que el índice compuesto de Shanghái añadió un 0,1% a 3.384,32 unidades.

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