La compañía aeronáutica Boeing admitió que quizás nunca encontrará qué fue lo que causó que fallaran las baterías de sus Dreamliner 787, lo cual condujo a que toda la flota de aviones fuera suspendida.

La admisión fue hecha por Larry Loftis, gerente general de la división del 787 de la compañía.

Actualmente se está llevando a cabo un reemplazo de los sistemas de batería en todos los 50 Dreamliner que están siendo operados por varias aerolíneas alrededor del mundo.

Boeing espera que los aviones reanuden su servicio en las próximas semanas.