La economía española se contrajo 1,3% el año pasado, dos décimas menos de lo pronosticado inicialmente por el gobierno de Mariano Rajoy, según estimaciones publicadas hoy por el Banco de España.

En su nuevo boletín mensual, el banco emisor indicó que la recesión se intensificó a finales de año. Así, en el último trimestre, el PBI español retrocedió 0,6% frente al trimestre anterior, en el que la caída había sido del 0,3%.

El Banco de España atribuyó el retroceso anual del PBI a una contracción en la demanda nacional de 3,9% frente a 2011, tanto en consumo como en inversión, frente a una aportación positiva de 2,6 puntos porcentuales de la demanda exterior, por el aumento de las exportaciones y el descenso de las importaciones.

En 2012, el empleo se redujo también a un ritmo superior al año anterior, con un descenso estimado del 4,3%, en parte debido a la reducción del empleo público, que cayó por primera vez desde el inicio de la crisis económica.

En el tercer trimestre, la tasa de desempleo en España había superado por primera vez el 25%, con 5,7 millones de personas sin trabajo.