Sus colegas inversionistas de riesgo no pudieron soslayar el hecho de que la marihuana sigue prohibida bajo ley federal. (Foto: James MacDonald/Bloomberg)
Sus colegas inversionistas de riesgo no pudieron soslayar el hecho de que la marihuana sigue prohibida bajo ley federal. (Foto: James MacDonald/Bloomberg)

(Bloomberg).El ao pasado, cuando tres empresarios de lamarihuanade Colorado hicieron una presentacin para cuarenta inversionistas deSilicon Valley, fue como si estuvieran hablando de alguna cosa obscena.

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Hubo sonrisas incmodas en la sala, como si estuviramos hablando de pornografa, dijo Fulton Connor, miembro de Sand Hill Angels Inc., que organiz el encuentro. Sus colegas inversionistas de riesgo no pudieron soslayar el hecho de que la marihuana sigue prohibida bajo ley federal.

Estn mucho ms relajados ahora, dice. En mayo, la empresa de Connor, que en general invierte en startups convencionales como la aplicacin de taxis Flywheel, destin US$200.000 a Tradiv, un mercado online para venta de cannabis al por mayor. Lo entienden ms como un negocio y la direccin a la que va el mercado, dijo Connor. Y ven dnde est siendo ms aceptado.

El estigma en torno a la industria de la marihuana, valuada en US$7.200 millones, se va disipando a medida que los estadounidenses se familiarizan con la idea, ms estados permiten el uso medicinal y recreativo y los negocios de marihuana empiezan a generar grandes utilidades. Se sabe que el sentimiento ha cambiado cuando el establishment se involucra, como lo hizo Microsoft Corp. el mes pasado al anunciar una colaboracin para rastrear marihuana para los gobiernos locales y estatales.

Los inversionistas de riesgo de Silicon Valley y los empresarios se presentan como vidos de riesgo, dispuestos a llegar donde inversionistas ms conservadores no. Sin embargo, los que apoyaron el negocio de la marihuana desde un principio, vienen de los sectores inmobiliario y del petrleo y el gas, no de Sand Hill Road. Las empresas de capitales de riesgo con frecuencia encontraron obstculos de parte de sus inversionistas, entre los que se cuentan universidades, que no queran apoyar al sector, dijo Keith McCarty, directivo de Eaze, que organiza entregas de dispensarios de marihuana medicinal en California. Agreg que estas restricciones se han relajado los ltimos aos.

Adelantndose a los cambios

En gran parte, la confianza creciente refleja la aceleracin en los esfuerzos por la legalizacin, que estn alcanzando una masa crtica. La mitad de todos los estados ya permite la marihuana para uso medicinal y cuatro permiten la posesin de pequeas cantidades para uso recreativo. En noviembre, California, con su gran mercado, estar entre los tres estados que en noviembre votarn sobre medidas para uso recreativo. La mayora de los estadounidenses dicen que la marihuana debiese ser legal, segn un sondeo de Gallup publicado en octubre.

Ciertos inversionistas estn tratando de entrar al Mercado adelantndose a las iniciativas de noviembre y posicionarse donde puedan para cuando ocurra una legalizacin ms amplia, dijo Evan Eneman, director de Casa Verde Capital de Snoop Dogg, una compaa de capital de riesgo en Los ngeles que se especializa en compaas en primeras etapas de sectores auxiliares de la industria del cannabis, como Eaze.

Aluvin de acuerdos

Mientras tanto, las compaas de capital de riesgo han anunciado un aluvin de acuerdos. Founders Fund, compaa de capital de riesgo cofundada por el multimillonario Peter Thiel, que incluye en su portafolio a Airbnb Inc., Facebook Inc. y SpaceX, contribuy el ao pasado una suma no divulgada a una ronda de inversiones en Privateer Holdings, fondo de inversiones empresarias de Seattle centrado en la marihuana.

Y Combinator Inc., incubadora que ayud con capital inicial para Airbnb y Dropbox Inc., el ao pasado puso US$120.000 en Confident Cannabis que crea software para laboratorios de testeo de marihuana y la misma suma en Meadow, que hace software para dispensarios y servicios de entrega. Hay muchas oportunidades de tecnologa en el cannabis, porque todas las industrias requieren software, dijo Justin Kan, socio de Y Combinator.

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