Tres de los cuatro ascendidos a la Liga 1 garantizan salud financiera: ¿Cuál es la situación del resto de clubes?

Ayer se inició la edición 104 de la Primera División del fútbol peruano (Liga 1) con cuatro nuevos equipos: Cienciano, Atlético Grau, Deportivo Llacuabamba y Carlos Stein.

Estos se sumaron a los otros 16 clubes –Alianza Lima, Binacional, Universitario de Deportes, Sporting Cristal, entre otros– que mantuvieron la categoría en el 2019.

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Pero no solo fue necesario el mérito deportivo para que estos veinte equipos concretaran su participación en el torneo, sino también tuvieron que cumplir otros requisitos [ver infografía] fijados por la Comisión de Licencias de la Federación Peruana de Fútbol (FPF) –como los de aspecto financiero-económico–, que se encarga de dar luz verde a los equipos.

NUEVOS INQUILINOS

Sergio Ludeña, administrador de Cienciano, comentó que el presupuesto del club del 2020 se ha incrementado en casi 40%.

Para esta temporada firmaron un vínculo con una financiera que les “permitirá tener tranquilidad y solidez” por los próximos tres años. Si bien se ha incluido una recaudación conservadora por taquilla, señaló que esperan superarla.

Arturo Ríos, presidente del Club Atlético Grau, manifestó que registran un incremento de 150%.

La taquilla no es considerada en el presupuesto, por lo que los montos que se recauden representarán importantes inyecciones. Ríos detalló que, a la fecha, registran como pasivos algunos premios económicos con sus jugadores (bonificaciones), que pronto serán cancelados.

En tanto, Eleazar Sánchez, gerente comercial del Club Deportivo Llacuabamba, si bien no detalló la variación del presupuesto, explicó que el principal ingreso provendrá de los patrocinadores y no del precio del oro, como lo dio a entender semanas atrás el presidente del club, Hernán Saavedra.

“[Lo del precio del oro] fue una emoción del presidente”, remarcó.

Los tres representantes de los clubes garantizaron a este Diario que se encuentran en la capacidad de afrontar los gastos para participar en este torneo.

“Los presupuestos se manejan con mucha responsabilidad”, dijo Ludeña. “De ninguna manera caeremos en incumplimiento de pagos. Nuestro presupuesto ya está cubierto”, señaló Ríos. “Tenemos la responsabilidad del caso”, acotó Sánchez.

Este Diario intentó recoger las declaraciones de Jorge Portilla, presidente del Carlos Stein, pero no se obtuvo una respuesta.

VIEJOS CONOCIDOS

Alfonso García-Miró, gerente de Sporting Cristal, aseguró que el presupuesto para este año es menor en casi US$1 millón respecto al del 2019, producto de no haber clasificado a la fase de grupos de la Copa Libertadores.

Aún así, señaló que cuentan con “todas” las garantías para cumplir sus pagos.

Raúl Leguía, secretario general de Universitario, detalló que frente al 2019 los ingresos se incrementan en más de 50%, principalmente, por patrocinios; mientras que los egresos en 20%, producto de la logística de participar en un torneo internacional.

Leguía añadió que se registra una deuda laboral, pero que ya fue fraccionada para obtener el licenciamiento respectivo.

Ricardo Bettocchi, administrador de FBC Melgar, refirió que el presupuesto no ha variado respecto al 2019.

“Estamos ordenados desde el 2014. No adelantamos facturas para tener ingresos”, agregó Bettocchi.

Los representantes de estos tres clubes comentaron que el principal ingreso responde a los derechos televisivos (en algunos casos hasta en 40%), seguido del márketing y la taquilla, respectivamente.

De este grupo de los clubes que mantuvieron la categoría, este Diario también intentó comunicarse con Alianza Lima y Sport Boys, pero no se obtuvo una respuesta.

Romina Fernández, gerenta de Licencias de la FPF, explicó que el proceso de revisión de los criterios para los licenciamientos son constantes –como, por ejemplo, los de aspecto económico-financiero– y, hasta el momento, no se han tenido mayores observaciones.

“La mayoría de los clubes, hasta la fecha, sí está cumpliendo todos los requisitos según el reglamento”, comentó Fernández.

MECANISMO DE GARANTÍA SE ACTIVA ANTE SITUACIONES DE RIESGO

En el Reglamento de Licencias FPF 2019, se establece que todos los clubes están sujetos a evaluaciones sobre el riesgo de solidez financiera o de incumplimiento de sus obligaciones por el Órgano de Control Económico-Financiero (OCEF).

Así, y aun cuando los equipos han presentado sus presupuestos anuales, surge como previsión que la comisión active con el club que crea conveniente los “mecanismos de garantías”.

El club que sea etiquetado bajo esta figura debe presentar una “fianza bancaria, garantía inmobiliaria, hipoteca u otros tipos de mecanismo de garantía real”, que sea equivalente al monto de la brecha identificada.

Las situaciones que califican para la activación de este mecanismo son incumplimientos de obligaciones laborales (deudas con jugadores, cuerpo técnico, entre otros) y de pago en favor de la FPF.