¿Qué marcas de telefonía móvil han pasado por el mercado peruano?

Varios vienen, algunos se quedan, otros se van apurando el paso. A lo largo de los 27 años de historia de telefonía móvil en al país hemos tenido más de una decena de marcas circulando, algunas de las cuales han durado menos que otras. Virgin es la partida más reciente, pero están por llegar nuevos actores que, esperamos, den que hablar.

El primero en incursionar en la telefonía móvil fue Genaro Delgado Parker, quien dejó en 1989 la dirección de Panamericana y fundó Tele 2000. Las primeras transmisiones móviles de Tele 2000 fueron el 8 de abril de 1990, justo una semana antes de la primera vuelta de las elecciones presidenciales.

Cuando arrancaron tenían solo tres antenas para mil clientes, muchos de los cuales eran amigos de la familia o estrellas de televisión que recibieron el celular como un regalo de lujo (el equipo costaba nada menos que US$1.590 y US$1.900 la línea).

Luego vino Telefónica, quien manejaba una marca para cada producto y usó el nombre Movistar para su división de telefonía celular. Muchos años más tarde unificaría todos sus servicios bajo esa marca, pero lanzarían una segunda marca, Tuenti, para atender al público joven. 

La competencia empezó a volverse dinámica cuando llegó Bellsouth, quien poco a poco fue adquiriendo el control de la empresa de Genaro Delgado hasta llegar al 100% de su posesión en el 1998. Al poco tiempo vino Nextel y en seguida, en el 2000, llegó la italiana Tim, quien dio la batalla por casi cinco años, hasta que le vendió sus operaciones a la mexicana América Móvil, quien manejó la marca Claro desde entonces en nuestro país. 

Por unos cuantos años tuvimos cuatro competidores - Tim, Movistar, Bellsouth y Nextel - y vimos no solo el inicio de la expansión del servicio, sino una real dinámica competitiva que empujó los precios de los equipos y las líneas a un nivel accesible para la clase media. La experiencia duró poco, pues Movistar compró Bellsouth, convirtiendo a la española en la dueña de la mayor parte del mercado.

Desde el 2005 al 2010 se dio la expansión del servicio - pasamos de cinco a 30 millones de líneas - pero solo teníamos dos grandes jugadores peleando, pues Nextel estaba abocado a un pequeño nicho.

Esta situación se mantuvo hasta abril del 2013, cuando la empresa de telecomunicaciones chilena Entel, compró las operaciones de Nextel. Un año después, en el 2014, tuvimos el lanzamiento de dos marcas: Entel y Bitel, la vietnamita que se animó a entrar para dar conectividad a las zonas con menores recursos económicos.

En los últimos dos años hemos vuelto al idílico estado de alta competencia y vimos como se pasó de dos jugadores con 95% del mercado a cuatro con, cada uno, más del 10%.

En ese encendido escenario llegó un nuevo modelo de competencia: los OMV, es decir operadores que ofrecen el servicio móvil pero no invierten en infraestructura, sino que alquilan la red a terceros. Eso les permite tener menores costos. No son grandes jugadores, son actores de nicho, pero influyen dando más dinamismo. 

Virgin fue el primer OMV. Estuvo dos años detrás del mercado local hasta que logró ingresar. No duraron más de un año. Decidieron vender sus operaciones a Inkacel, quien se orientará al segmento D con microrecargas.

Pero no estarán solos en esa categoría. MTC ha informado que se nos vienen tres OMV más. Al menos han solicitado el registro y realizado todos los trámites para poder lanzar su servicio. Ellos son Dolphin, Farmagusta y Cuymobile. Veremos que pasa con ellos en el 2018. Esta historia tiene todavía mucho pendiente por desarrollar. 

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