El fabricante de autos francés, Peugeot-Citroen, accedió a aceptar un paquete de rescate para salvar la compañía, tras pérdidas de US$ 2.700 millones el año pasado.
La fabricante de automóviles china Dongfeng y el gobierno francés contribuirán con la mitad cada uno. Los accionistas de Peugeot, que todavía deben dar el visto bueno al trato, contribuirán con financiación adicional.
Según se informó, con la referida operación, la compañía china y Francia se harán del 14% del total del accionariado del consorcio automovilístico.
La industria automotriz de Europa se ha enfrentado a varios años de dificultad, que han añadido obstáculos estructurales a la compañía. Por eso, en el ejercicio del 2013 hubo una disminución del 2,4% respecto a los ingresos por importe del 2012.