Nicolás Vanegas

La importancia de que las empresas asuman un rol protagónico en la preservación del medio ambiente es innegable. En un mundo cada vez más consciente de los desafíos ambientales, la sostenibilidad corporativa se ha convertido en una necesidad urgente, y parte de la responsabilidad de las compañías es liderar el cambio hacia un futuro más verde y sostenible.

Para lograrlo, es necesario que entendamos la importancia de ver la sostenibilidad bajo un enfoque colaborativo en lugar de uno competitivo. La preservación del medio ambiente no puede ser una carrera individual por ser la empresa más “verde”, sino una tarea que requiere esfuerzos conjuntos de diferentes actores, a través de los cuales obtenemos resultados que de manera individual serían inalcanzables.

Las empresas también tenemos la responsabilidad de educar a los consumidores sobre la importancia de adquirir hábitos de comportamiento que impacten positivamente el medio ambiente. Es imperativo que ofrezcamos productos y servicios más sostenibles, pero que además informemos a los consumidores sobre las consecuencias de sus acciones diarias y de que elijan alternativas más respetuosas con el entorno. Es una tarea colaborativa, por eso al educar a los consumidores las empresas podemos contribuir a cambiar las actitudes y comportamientos de la sociedad hacia prácticas más sostenibles.

Y es que hoy en día la sostenibilidad ya no debería ser una opción para las empresas, sino un imperativo y una responsabilidad que tenemos con la sociedad y el planeta. El cambio climático, la pérdida de biodiversidad y otros problemas ambientales nos afectan a todos, sin importar el sector o la ubicación geográfica. En el marco de la necesidad de preservación del planeta, “L’Oréal por el Futuro”, nuestro programa corporativo de Sostenibilidad establece los compromisos que tenemos con la sociedad al 2030. El primero empieza por la transformación interna que debemos efectuar para garantizar que nuestras actividades sean respetuosas de los límites planetarios y nuestro impacto en materia de agua, clima, biodiversidad y recursos. El segundo es el fortalecimiento de nuestro ecosistema de negocio, ayudándolo a hacer la transición hacia un mundo más sostenible de manera colaborativa. Y finalmente, estamos apoyando las necesidades sociales y ambientales más apremiantes en los lugares donde operamos.

Hemos integrado objetivos y metas claras en nuestra estrategia, alineadas con los criterios ESG para evaluar nuestro rendimiento en términos ambientales y sociales. Algunos de estos objetivos son lograr la eficiencia energética y el uso exclusivo de energía 100% renovable en todos nuestros sitios de operación para el año 2025. Nos hemos comprometido a utilizar el 100% de plásticos reciclados o biológicos en el empaquetado de nuestros productos para el 2030, así como a reducir en un 50% las emisiones de gases de efecto invernadero por cada producto en comparación con 2016. Además, destinaremos €150 millones para abordar problemas sociales y ambientales urgentes, relacionados con el apoyo a mujeres en situaciones de extrema vulnerabilidad, proyectos de preservación del medio ambiente, y proyectos de economía circular.

La sostenibilidad empresarial es una responsabilidad que tenemos con la sociedad y el planeta. Es hora de asumir ese liderazgo ambiental que requerimos, y de trabajar articuladamente para garantizar un futuro sostenible. Ya pasamos la hora de hacerlo mejor, ahora debemos hacer lo que se necesita.

Nicolás Vanegas, Director de Asuntos Corporativos, Engagement y Sostenibilidad – L´Oréal Centroamérica y Región Andina