Como todo en la vida, las finanzas personales requieren de un determinado orden para evitar desequilibrios que terminen en serios problemas económicos. ¿Qué hacer al respecto? De acuerdo con Patricia Foster, experta en finanzas personales del ABC de la Banca del BCP, una forma sencilla de evitar líos económicos es elaborando un presupuesto familiar para ordenar nuestras finanzas.

En detalle, añade, se trata de cinco pasos puntuales para estructurar un presupuesto mensual. Presta atención.

1° La herramienta. El trabajo inicia escogiendo una herramienta donde se registrará todos los datos necesarios. Esta herramienta puede ser desde una libreta de apuntes o un cuaderno hasta una página de excel. Solo recuerda que esta herramienta debe de estar disponible en todo momento para que puedas hacer revisiones y registros.

2° Registrar la información. En la herramienta hay que registrar toda la información de nuestros gastos e ingresos en un mes. Para ello es conveniente disponer de dos columnas a fin de indicar en cada una el dato que corresponda. Antes de hacer las inscripciones, tómate el tiempo necesario para hacerlo lo más preciso posible.

3° Identificar los ingresos. Es importante que al registrar tus ingresos sepas discernir entre los que son tus ingresos fijos (sueldo, pensión de jubilación, dinero por otras rentas) y los ingresos variables (horas extras, comisiones, premios, inversiones, trabajos independientes, colaboraciones, etc.). Esto te permitirá tener una idea más acertada de cuánto dinero realmente logras percibir.

4° Identificar los gastos. Este el paso más complejo, porque deberás de ser lo más riguroso posible. La idea es que escribas tus gastos fijos (alquiler o hipoteca, servicios básicos, mensualidad escolar, impuestos del hogar, impuesto vehicular, transporte y gasolina, tarjetas de crédito), pero también y de la forma más certera tus gastos variables (alimentación, aseo y limpieza, útiles de estudio) y tus gastos extras (regalos, viajes, vacaciones, cines, salidas, ocio, entretenimiento, etc.). Si te apegas a esto, podrás realmente observar tu nivel de gasto.

5° Gestionar el presupuesto. Una vez que ya tengas en números tus ingresos y gastos, deberás hacer un balance. Si tus gastos superan a tus ingresos, estás en rojo, en déficit, por lo que debes de hacer un recorte en gastos variables o extras o aumentar los ingresos para equilibrar tus finanzas. Sin embargo, si el balance indica lo contrario a esta primera situación, el dinero restante en ingresos puedes y debes destinarlo al ahorro (entre 5% y 10% de tu sueldo) que bien podrá servirte para futuras inversiones.

A modo de conclusión, la especialista del BCP señala que lo importante de ordenar nuestras finanzas es lograr que los ingresos cubran nuestros gastos, incluido el ahorro.