El ambiente de las festividades cada vez se siente con mayor intensidad. La cercanía del pago de la gratificación, que debe depositarse como máximo el próximo sábado 14 de diciembre, no hace más que abonar la disposición a un mayor gasto que caracteriza a las celebraciones de fin de año.
Sin embargo, invertir este dinero adicional de manera meditada podría ser el mejor regalo, pues un buen manejo de nuestra gratificación nos podría permitir liberarnos de deudas, concretar futuras compras sin pagar intereses, prevenir eventualidades y hasta multiplicar nuestros ahorros.
Lo primero es saber de cuánto dinero disponemos. La Cámara de Comercio de Lima (CCL) recordó hoy que los trabajadores de la actividad privada recibirán, además de su gratificación equivalente a un sueldo menos el Impuesto a la Renta para los que ganan más de S/.1.850 al mes una bonificación adicional de alrededor del 22%, como sucede desde el 2009.
Este 22% es el resultado de la suma entre el 9% del sueldo bruto que los empleadores dejarán de abonar a EsSalud y se lo otorgarán al trabajador, más un 13% adicional que se dejará de descontar por concepto de pensiones para la ONP o su AFP.
En cambio, en el caso de los trabajadores afiliados a una Empresa Prestadora de Salud (EPS), la bonificación no será del 9%, sino de 6,75% del monto de la gratificación, con lo que se sumaría un adicional de 19,75%. Este beneficio abarca a los trabajadores subordinados de la actividad privada con contrato indefinido, a plazo fijo y a tiempo parcial, informó la CCL.
De acuerdo al reglamento, los empleados nuevos de pequeñas empresas obtendrán el pago de medio sueldo, al igual que en el caso de las trabajadoras del hogar.
TRES CAMINOS En orden de prioridad, una de las alternativas más convenientes sería liberarnos de alguna deuda que se esté arrastrando. Siempre es bueno recordar que mientras más rápido paguemos una deuda, menor será el interés que tengamos que afrontar, y los intereses, ya sea derivados del uso de tarjetas de crédito o préstamos de consumo, no son lo que se dice bajos.
Tal y como consta en el portal del usuario de la SBS, las tasas por tarjetas oscilan entre el 71,61% y el 117% anual para un préstamo de S/.1.000. La tasa por crédito de consumo tampoco es baja: la de menor interés por un crédito similar es de 32%.
Por tal motivo, así no tengamos deudas atrasadas, sería una alternativa saludable adelantar el pago de las cuotas de un préstamo. Además, un historial limpio, afirma Interbank, nos permitirá acceder a más y mejores créditos.
DEPÓSITOS Si es que no hay deudas a la vista, otra opción conveniente es ahorrar. La gratificación representa un ingreso extra que se podría emplear en alguna de las alternativas de depósito, las cuales en algunos casos como el de las cajas municipales y rurales ofrecen tasas de interés atractivas. Hacer crecer nuestro dinero es una apuesta a futuro que permite lidiar con eventualidades sin necesidad de pedir préstamos, por los que, ya sabemos, hay que pagar intereses que no son bajos.
Además, recomienda Interbank, esta alternativa es un buen comienzo para alcanzar alguna meta, alguna compra futura. Es importante recordar que el dinero depositado está disponible para su retiro en cualquier momento.
A MAYOR RIESGO Por último, para los usuarios un poco más arriesgados existe la opción de rentabilizar este abono a través del uso de los llamados fondos mutuos, que son un instrumento mediante el cual un inversionistas de capital moderado puede invertir en bonos o acciones de empresas que cotizan en bolsa, ya sean nacionales o internacionales.
Existen dos modalidades: fondos mutuos fijos y variables. Los primeros son una opción más segura, ya que la inversión se hace sobre bonos de empresas, mientras que los segundos se hacen sobre acciones y resultan más riesgosos.
Estas inversiones se hacen a través de las Sociedades de Administración de Fondos (SAF).
Qué tipo de instrumento elegir dependerá de su perfil de ahorro, nivel de ingreso y el riesgo que esté dispuesto asumir, recomienda Interbank. Como toda inversión, los rendimientos no los verá a corto sino en un mediano o largo plazo. Por ello, es importante tener claro en cuánto tiempo se necesitará ese dinero y cuál será su uso final.