En contraste con el optimismo que mostró en sus reportes del primer y segundo trimestre de este año, BBVA Research ajustó a la baja sus proyecciones del crecimiento económico del Perú tanto para el 2013 como para el 2014.
Para este año, la gerencia de Estudios Económicos del banco espera que el PBI se expanda un 5,8%, cifra menor al 6,5% que proyectaba hace tres meses. Par el 2014, la proyección se ha recortado de 6,3% a 5,8%.
BBVA Research explicó que las proyecciones son menores a las de hace tres meses debido a que el entorno externo menos favorable inducirá a una moderación del gasto privado, en particular, de la inversión privada.
Esta perspectiva es consistente con la disminución del optimismo empresarial durante este año, el que se ha visto afectado por la volatilidad en los mercados financieros internacionales, las condiciones de financiamiento externas menos favorables, los menores precios de los metales que Perú exporta y el menor crecimiento esperado para China, explicaron.
Agregaron que la ralentización de la inversión implicará un menor dinamismo del mercado laboral, y por lo tanto, del consumo. La revisión a la baja del gasto privado ha sido particularmente importante en nuestras revisiones para este y el próximo año, comentó.
En efecto, los 0,07 puntos porcentuales de diferencia entre la proyección anterior de 6,5% y la actual de 5,8% se explica porque la disminución del gasto privado impacta en una disminución de 0,09 puntos porcentuales, que es moderado en 0,02 puntos por el aumento del gasto privado.
A partir de 2014, proyectamos una mayor expansión fiscal debido al desarrollo de grandes obras de infraestructura, lo que atenuará en alguna medida el menor impulso de la demanda del sector privado. Como resultado del mayor gasto público y de mejoras más acotadas en los ingresos fiscales con relación a lo esperado hace tres meses, proyectamos una reducción gradual de los superávit públicos a partir de este año, y eventualmente déficit moderados a partir de 2015, agregó.
PRINCIPALES RIESGOS BBVA agregó que los principales factores de riesgo sobre la economía peruana provienen del exterior.
Entre ellos, mencionó el proceso de recorte del estímulo monetario que prepara la Reserva Federal de Estados Unidos sea desordenado y que ello genere un ajuste más intenso en las condiciones de financiamiento a nivel global y una mayor incertidumbre.
El segundo factor de riesgo para el banco es que la desaceleración en China a mediano plazo sea más pronunciada que la prevista en el escenario base.
Sin embargo, destacó que, en la medida que no se prevén presiones inflacionarias, el Banco Central de Reserva cuenta con un amplio espacio para adoptar un rol estabilizador que le dé mayor soporte al gasto privado, en caso que sea necesario.
En ese sentido, consideró que la principal línea de acción para orientar la política monetaria hacia una posición algo más acomodaticia en el entorno de turbulencia externa será revertir parcialmente los altos niveles de encaje.