Reconstrucción con Cambios depende de la capacidad de gasto de 311 entidades

(Informe de El Comercio-IPE) Una semana antes de los cambios ministeriales de setiembre, el Consejo de Ministros aprobó el Plan Integral de Reconstrucción con Cambios (PIRCC), el cual proyecta una inversión de S/25.655 millones durante los próximos tres años.

Ese monto, que equivale a dos tercios del presupuesto total destinado a la inversión pública durante el 2017, sería un importante impulso fiscal que –según el Ejecutivo– permitiría la generación de 150 mil empleos (entre directos e indirectos) en las zonas de influencia. Un primer tema de debate alrededor del PIRCC ha sido respecto a las autoridades responsables de la ejecución.

La inversión en obras de reconstrucción asciende a S/19.759 millones y tiene como objetivo atender a los 876 distritos declarados en emergencia. Estas obras se realizarán a través de casi 10.000 intervenciones y estarán a cargo de 311 unidades ejecutoras distribuidas en los tres niveles de gobierno.

El gobierno nacional concentra el 74% del monto total de dicha inversión. Le siguen los gobiernos regionales, que se encargarán del 21%; y por último, los gobiernos locales, que deberán ejecutar el 5% del valor de las obras.

Según el PIRCC, los ministerios (Agricultura y Riego; Educación; Salud; Transportes y Comunicaciones; Vivienda, Construcción y Saneamiento) deberán ejecutar S/14.708 millones. Para poner esta cifra en contexto, el presupuesto 2017 de dichas entidades para la inversión pública dedicada a la construcción de edificaciones asciende a S/9.342 millones.

La capacidad de gasto, entonces, será un elemento fundamental para la efectiva ejecución del PIRCC. En los últimos dos años, sin embargo, solo dos de las cinco carteras tuvieron una ejecución promedio de más del 75% sobre este tipo de recursos.

Las otras tres registraron una ejecución promedio de 66%. Nueve gobiernos regionales tendrán la responsabilidad sobre S/4.073 millones en obras de reconstrucción, y La Libertad y Piura son los encargados del 82% de dicha inversión. Los S/1.800 millones y S/1.530 millones que se asignarán, respectivamente, a La Libertad y Piura durante los próximos tres años equivalen a 4,2 y 2,7 veces el monto de su presupuesto 2017 para la construcción de edificaciones.

En los dos últimos años, sin embargo, mientras que La Libertad registró una ejecución promedio de 88%, la autoridad de Piura solo llegó al 68% (con lo cual no habría llegado al corte mínimo de 75% para ser considerado en el grupo de ejecutores, pero se hizo la excepción).

Alcanzar una adecuada y efectiva inversión de la reconstrucción también será un desafío de gestión para los gobiernos regionales. Los gobiernos locales, a través de 297 municipalidades, deberán encargarse de S/978 millones.

Cada una de estas entidades, que tendrán el rol de unidades ejecutoras, cumplió el requisito de haber logrado una tasa de ejecución mayor al 75% de su presupuesto destinado a la inversión para la construcción de edificaciones en los dos últimos años o al menos en el último año.

Otras cientos quedaron fuera. La velocidad de avance de la ejecución de obras para gobiernos regionales y locales, por otro lado, todavía permanece por debajo de lo esperado.

La inversión en obras de prevención asciende a S/5.446 millones. Este componente, según detalla el PIRCC, es un elemento clave para asegurar que en el futuro no se requieran nuevas reconstrucciones.

Pablo de la Flor, director de la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios, indicó que, “de haber invertido S/1.000 millones en los últimos diez años en prevención, se hubieran ahorrado S/18.000 millones en reconstrucción”.

En este contexto, vale la pena recordar que la Contraloría anunció que realizará un seguimiento continuo a las obras de reconstrucción: antes, durante y después de sus ejecuciones desde ahora y hasta el 2020.

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