De acuerdo con Alonso Olaechea, gerente general de Credicorp Capital Fondos, el anuncio de la ejecución de proyectos mineros como Tía María y de proyectos de inversión, en general, permiten reactivar la confianza empresarial.
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No obstante, destacó que más importante que los anuncios per se es mantener un clima de estabilidad para la inversión que incentive la toma de decisiones de inversión.
Asimismo, agregó que existe voluntad de las empresas en invertir en Perú pese a la coyuntura internacional. Dicha voluntad "no se ha deteriorado" y representa una oportunidad que muchas otras economías no tienen.
INVERSIÓN PRIVADA
En cuanto al segundo semestre del 2019, Olaechea señaló que se prevé que la inversión privada minera continúe su trayectoria creciente.
"La inversión privada minera debería continuar su trayectoria positiva y debería intensificarse la inversión de capital de proyectos emblemáticos como Mina Justa y Quellaveco", añadió.
La inversión privada no minera, por su parte, también debería repuntar. No obstante, esta depende de tres factores: la inversión pública, la inversión minera y la confianza. Conforme se recuperen la inversión pública y la confianza empresarial, y siga mejorando la inversión privada minera, la inversión privada no minera mejorará, señaló Olaechea.
INVERSIÓN PÚBLICA
El gerente general de Credicorp Capital Fondos resaltó que si bien la inversión pública de los primeros seis meses ha tenido un bache coyuntural -debido al cambio de los gobiernos sub nacionales-, esta debería recuperarse en el segundo semestre.
"La ejecución pública ha caído en los primeros seis meses, por encima del 10%; sin embargo, esto ha sido 'mejor' que lo sucedido en años anteriores", agregó.
Asimismo, sostuvo que la inversión pública debería repuntar conforme vayan acelerándose las tomas de decisiones y la ejecución por la Reconstrucción con Cambios.
Ello permitiría, junto a los primeros resultados de algunos indicadores como el repunte de la producción de electricidad, que la economía peruana crezca alrededor de 4% o más en la segunda mitad del año, alcanzado una tasa anual de 3,2%.