¿El gobierno podrá cumplir con las metas de agua y saneamiento?

Una de las metas de este gobierno –de cara al 2021– es alcanzar el 100% de cobertura de agua potable y saneamiento a nivel nacional. En un país donde existe déficit hídrico en un aproximado de 17 regiones, este objetivo es sumamente ambicioso.

Flavio Ausejo, docente de la Escuela de Gestión Pública de la PUCP, no es ajeno a este factor; asegura que la creación de una unidad especializada para las inversiones en este ámbito ayudarán a alcanzar dos importantes objetivos: establecer prioridades y un ordenamiento adecuado de los proyectos.

¿Está preparado el sector para asumir esta tarea? Según Ausejo, los decretos legislativos emitidos por el Ejecutivo “van en la línea correcta” y generan el marco legal que les permite a los prestadores de servicios a nivel nacional, regional y local, poder tener las herramientas normativas para alcanzar la meta.

“En realidad, lo que se necesita aquí es un shock de gestión, porque el dinero va a estar de alguna manera disponible. El ministerio tiene destinados S/1.600 millones para proyectos, pero lo que se necesita es la capacidad de gestión para transformar la plata en mejores servicios”. 

Ausejo apuntó que el desafío para el gobierno será tener la capacidad de movilizar los recursos. “Sedapal, por ejemplo, tiene –en términos históricos– un promedio de capacidad de inversión anual que va entre S/500 y S/600 millones de soles al año. En su mejor momento, son S/800 millones. Pero, las necesidades de Lima son al menos de S/1500 millones al año. Esto quiere decir que la empresa tiene dificultades, porque no solo es una organización que tiene que ver inversión, sino que también tiene que administrar el servicio”.

En ese sentido, indicó que decretos legislativos le han dado la oportunidad al estado de crear “una unidad especializada para inversiones; una unidad ejecutora que esté en el Ministerio de Vivienda y que solo se encargue de temas de inversión para Lima”.

¿Qué permitirá esta unidad? En primer lugar, priorizar. Al ser una oficina dedicada únicamente a estas labores, el experto aseguró que se podrán establecer criterios para localizar a las poblaciones que necesiten con urgencia agua, saneamiento y, de este modo, se le pondrá por delante de otras. “Es un elemento importante que en Sedapal era débil”, señaló.

“Un segundo elemento es que permite establecer un ordenamiento en los proyectos de tal manera de que se pueda tener especialización y los servidores públicos responsable de este trabajo estén concentrados en. Recordemos que el SNIP ha sido derogado y, por consiguiente, van a haber nuevas reglas. Hay que aprender a jugar con esas y eso va a tomar un poquito de tiempo”, añadió Ausejo. “Teniendo personal especializada en el tema en una unidad ejecutora, hay una alta probabilidad de que esto se pueda desarrollar de una manera mucho más rápida”, puntualizó.