Sectores de agroindustria y tecnología son los que más personal contratan

Los sectores de agroindustria y tecnología fueron los que más contrataron personal en los últimos doce meses, según cifras de PageGroup, compañía de reclutamiento de personal.

Las contrataciones en el sector agroindustrial crecieron 15%, lo que responde a varios factores. Uno de ellos se debe a que hubo un efecto rebote después del Fenómeno del Niño Costero, que azotó al país a inicios del 2017.

En conversación con El Comercio, Ignacio Hernández, executive director de PageGroup, señala que se esperaba que las consecuencias de este fenómeno fueran peores para el sector agrícola.

"Ante esta situación, el empresario fue valiente. Apostó por reclutar más talento para seguir creciendo e incrementar sus exportaciones", señaló Hernández. 

En este sector, los puestos de trabajo más demandados han sido los de gerente agrícola, jefes de fundo y perfiles de ventas, a nivel local como de exportación.

Por otro lado, Hernández menciona que en el sector tecnológico han registrado un crecimiento en el número de contrataciones llegando al 13%. Sin embargo, desde 2016 al 2017,  el aumento fue de 50%, debido a que en este periodo se dio el "boom de la transformación digital".

"Está habiendo un boom con el tema de la transformación digital, que no solo afecta al mundo de la banca o el de seguros, sino a muchos otros sectores, como, por ejemplo, los de retail o grandes corporaciones", indicó.

Los compañías de este sector, el año pasado —mientras se desarrollaba la estrategia de ventas— le solicitaban a PageGroup perfiles más ligados a la venta técnica o puestos técnicos, como arquitecto digital, scrum master, especialistas en UX (Experiencia del usuario) y en UI (Interfaz de usuario).

No obstante, en el 2018, el perfil más solicitado es el de los técnicos en tecnología de la información —y menos de ventas—, debido a que las empresas se encuentran en el proceso de ejecución de sus proyectos de transformación digital, señala el ejecutivo.

TALENTO FUERA DEL PAÍS

El incremento en la demanda de talento especializado, ha obligado al empresario agrícola o al proveedor de la empresa a buscar el talento en el extranjero. Chile, España, México , Colombia y Argentina, son algunos de esos países.

La situación para el sector tecnológico no dista mucho del agrícola, ya que también se ha tenido que recurrir a profesionales extranjeros porque el mercado peruano no podía facilitar ese talento.

"Carecemos de tiempo y experiencia en estos sectores, a diferencia de otros países en los que estas actividades se realizan desde hace muchos años, lo que nos permite encontrar el talento que se necesita para las plazas que buscamos", subrayó.

ROL DE LAS UNIVERSIDADES

"La habilidad blanda de hoy es la habilidad dura del mañana", dice Hernández, quien comenta que suele sugerir a sus clientes priorizar los perfiles con sólidas habilidades blandas, debido a que estas son más difíciles de conseguir. En cambio, los conocimientos y habilidades duras se pueden aprender con el tiempo.

En ese sentido, señala que el reto para las universidades o institutos es lograr que sus métodos de enseñanza sean menos teóricos y más prácticos, debido a que el mercado demanda también profesionales con otro tipo de habilidades que van más allá de las mecánicas.

"Muchas veces las universidades no desarrollan en sus alumnos las habilidades blandas, que se ven reflejadas en la actitud que una persona tiene frente al trabajo, la disposición para trabajar en equipo y en la capacidad de liderazgo", critica.

IMPACTO DE LA CORRUPCIÓN EN LAS EMPRESAS

Debido a los actos de corrupción que se han ido revelando en los últimos años en nuestro país, Hernández señala que hay una gran demanda de parte de las compañías para perfiles de compliance y de regulación.

"Así, la empresas buscan tener operaciones más maduras, valores éticos más marcados y evitar posibles impactos que puedan generarles a futuro una situación como la que se está dando con el escándalo de Odebrecht y Lava Jato", subrayó.

Para Hernández, ha sido positivo el impacto que han tenido las revelaciones de los actos de corrupción en las compañías, en término de que estas están más preocupadas por el bueno manejo de sus gobiernos corporativos y de respeto por la ética empresarial.