Venta de viviendas cerrará con colocaciones similares al 2014

La venta de viviendas en el 2015 estuvo por debajo de lo que esperaban las empresas del sector al comenzar el año. Aunque el primer trimestre marcó un repunte y se colocaron casi 4 mil viviendas en Lima, según la medición de la consultora Tinsa, el resto del año las ventas se han mantenido en menos de mil unidades por mes. 

“Ha sido un año estático y terminará con ventas muy similares al 2014”, dice Eduardo Fiestas, director de Tinsa. En espera de los resultados del último trimestre, esta cifra podría estar cerca de las 12 mil unidades, muy similar a lo proyectado también por Capeco.

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En un año en que los precios no variaron tanto, Fiestas dice que la gente no compró ni las empresas construyeron más porque, ante el menor crecimiento de la economía, sus expectativas decayeron. 

MEDIDAS A PLAZO LENTO 
En julio el Ejecutivo promulgó la ley de arrendamiento con la que se crearon los mecanismos de alquiler-venta y leasing inmobiliario y su reglamento salió en noviembre, pero tanto los bancos como las inmobiliarias han mostrado escaso entusiasmo en aplicarlas.

Para ambos resulta un nuevo negocio al que tardarán en adaptarse, si es que deciden sumarse.

Según una reciente encuesta de Capeco, solo el 20% de los promotores estaría interesado en el alquiler-venta. Sin embargo, el ministro de Vivienda, Francisco Dumler, ha reconocido que ambas opciones pueden tardar en ofrecerse comercialmente, pero que se han diseñado en respuesta a lo que requería el sector.

“Le quitaron los dientes al tigre”, dice Enrique Zevallos, gerente del gremio inmobiliario ADI Perú, para graficar que el ministerio había planteado puntos para el alquiler-venta que al final no se recogieron en la ley.

Por ejemplo, la intención de que un porcentaje de cada pago mensual por alquiler se acumule a favor del cliente y sirva luego para una cuota inicial. “Sin eso se le quitó potencia a la ley y todo ha quedado como un alquiler más”, dice. 

En este escenario, Fiestas señala que es urgente renovar la política estatal de acceso a vivienda a través de los programas Mivivienda y Techo Propio, con la intención de que el segmento de menores ingresos, que es donde ahora está la gran demanda, pueda comprar de acuerdo a la medida de sus capacidades.

El director ejecutivo de Capeco, Guido Valdivia, ha señalado que la oferta en Lima es casi nula para este grupo y para promoverla se necesita elevar el monto de los subsidios actuales, como ocurre en Colombia o Chile.

Si los promotores construyen menos para este segmento es porque al problema de encontrar terrenos saneados se suma que este público es el que más dificultades tiene para financiarse. Todo lo contrario a lo que pasa con el segmento B, que es donde hay más oferta y compras.

Zevallos añade que las empresas se han preocupado por mejorar su estructura de costos y de financiamiento, en espera de que en el segundo semestre del 2016, pasada la incertidumbre de las elecciones, el mercado reaccione.