Ilustración: Giovanni Tazza
Ilustración: Giovanni Tazza
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Katherine Subirana Abanto

La conocemos como La Mariscala en honor al título que ostentaba su esposo, pero la figura de Francisca Zubiaga y Bernales ha superado a la de su consorte, el mariscal y presidente del Perú Agustín Gamarra, por más de una razón.

También conocida como Doña Pancha, nació en Cusco el 11 de setiembre de 1803. Tras un breve paso por el convento, se casó en 1825 con Gamarra, entonces prefecto de Cusco. La leyenda de Francisca Zubiaga empezó a gestarse cuando acompañó a su marido en la campaña liderada por Simón Bolívar y terminó de consolidarse cuando Agustín Gamarra asumió la presidencia del Perú en 1829. Entonces llegaron a referirse a ella como “la presidenta”.

Su figura y carácter indomable trae indefectiblemente a nuestra memoria a mujeres como Manuelita Sáenz o Micaela Villegas; pero Francisca Zubiaga cae ‘mejor parada’ en la historia porque ella, a diferencia de las otras dos, sí estaba casada. El magnetismo de las tres mujeres mencionadas es innegable, por lo que no sorprende que, a través del tiempo, su vida ha sido abordada de diferentes maneras por historiadores, escritores y artistas. La Mariscala, por ejemplo, acaba de revivir en la publicación de un libro y en una obra de teatro de próximo estreno.

Doña Pancha en el siglo XXI

Francisca Zubiaga y Bernales murió en el exilio, en Chile, el 8 de mayo de 1835, a causa de una tuberculosis. Durante su huida, conoció a Flora Tristán, quien escribió sobre ella en “Peregrinaciones de una paria” (1838) lo siguiente: “Era de mediana talla y fuertemente constituida, a pesar de haber sido muy delgada; su figura no era en verdad bella, pero, si se juzgaba por el efecto que producía en todo el mundo, sobrepasaba a la mejor belleza. Como Napoleón, el imperio de su belleza estaba en su mirada, cuánta fuerza, cuánto orgullo y penetración; con aquel ascendiente irresistible ella imponía el respeto, encadenaba las voluntades, cautivaba la admiración. Su voz tenía un sonido sordo, duro, imperativo”.

Este breve encuentro es tomado en cuenta para la puesta en escena de “La Mariscala”, un musical que se estrenará en noviembre con Alejandra Egoavil y Marcello Rivera en los roles de Francisca Zubiaga y Agustín Gamarra, y Gisella Ponce de León como Flora Tristán.

Claudia Núñez, arqueóloga e historiadora cusqueña, formó parte del equipo de dramaturgia de esta obra no solo por sus oficios profesionales, sino también porque es la autora de la más novísima publicación sobre el personaje que hoy nos convoca. “La Mariscala: la historia no contada de Francisca Zubiaga y Bernales, primera presidenta del Perú” (PRH 2022).

Estamos frente a un trabajo cuyo resultado final aleja a la autora de la rigurosidad del trabajo historiográfico, pues si bien se vale de él hasta cierto punto, el producto final contiene muchísimos elementos de ficción. Claudia Núñez es la primera mujer que se acerca a la historia de La Mariscala, pues los anteriores esfuerzos por conocer esta figura habían sido de hombres. El más conocido es el de Abraham Valdelomar, que en 1915 publicó la biografía novelada “La Mariscala: Doña Francisca Zubiaga y Bernales de Gamarra”.

Ambas propuestas demuestran que estamos en una época propicia para recuperar la figura de las mujeres que trascendieron el apellido de sus esposos o amantes. Una oportunidad que no debemos desperdiciar.

A SABER...

 -Las entradas para el musical “La Mariscala” están a la venta en la web de Joinnus.

- El libro de Claudia Núñez sobre la vida de La Mariscala está a la venta en librerías a S/59.

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