MARISSA CHIAPPE LANATTA
Desde un buen martini fruto de la coctelería más clásica hasta un pop corn de pisco sour hecho con nitrógeno líquido, la coctelería mundial cambia constantemente e incluye nuevas sensaciones y sabores que son llevados a las barras del mundo. Luego de una ardua búsqueda, Diageo encontró a los mejores bartenders del planeta para llevarlos a un crucero por el Mediterráneo. En medio del mar, se disputaron el título de mejor bartender del globo, utilizando exóticos ingredientes, sabores de siempre y mucha imaginación. El ganador de la reñida competencia fue David Ríos.
El español cautivó a los jueces con su ponche vasco de oro y su combinación de Aperol con sabor a fresas, naranja enana, jugo de uvas, clara de huevo y vodka Ketel, a bordo del crucero el Azamara Journey. Conversamos con él para que nos cuente cuáles son las novedades en las barras del mundo y el certamen.
¿Cómo se animó a participar en el concurso? Porque me gusta aprender y creo que World Class me daba esa oportunidad: la de estar con los mejores bartenders del mundo.
¿Qué cosas veremos en las barras este año? El retorno de los ponches. Otra cosa que veremos es el Chartreuse. Para mí, se trata de uno de los licores que estaba un poco en el olvido y que ha vuelto con fuerza. De hecho, es una bebida que aporta notas muy diferentes al resto de licores.
¿Cuáles son las tendencias en coctelería? ¿Seguimos en la onda molecular y futurista? Creo que menos es más. La nueva tendencia es crear nuevos cocteles a partir de los clásicos de siempre.
¿Cómo podemos saber si estamos frente a un buen bartender? Por su técnica, por su seguridad y por ‘know how’.
¿Cómo nacen las recetas de sus cocteles? Todos los cocteles llevan consigo una historia, un porqué.
¿Qué hará ahora que ganó el concurso? Espero con entusiasmo el año que viene ya que estaré viajando alrededor del mundo como embajador del programa, conociendo a mis colegas, educando nuevos talentos y aprendiendo sobre nuevas culturas y tendencias cocteleras de todo el mundo.