Puede asustar a algunos por su olor penetrante y sabor intenso. Sin embargo, más allá de sus visibles características gastronómicas, el ajo es un alimento capaz de brindarnos múltiples beneficios. Conoce cuáles son aquí.

CONTRA LA HIPERTENSIÓN Según un estudio elaborado por la Universidad de Adelaida, en Australia, este vegetal puede reducir la presión arterial. Asimismo, trabajos previos han demostrado que es capaz de disminuir los niveles de colesterol en determiandos pacientes. Sus propiedades en favor de la buena circulación y la aparición de coágulos también son conocidas.

A FAVOR DEL SISTEMA INMMUNOLÓGICO El ajo contiene alicina, ajoeno y tiosulfinatos, tres compuestos que ayudan al cuerpo a combatir las infecciones, según apunta el portal de la revista “Ask Men”. Además sus propiedades como descongestionante y aliado contra los resfríos también son conocidas. Un estudio comprobó que quienes ingieren grandes cantidades de este alimento al inicio de un resfriado se sanan más rápidamente.

ARMA CONTRA EL ASMA Gracias a sus propiedades antiinflamatorias, el ajo ha sido considerado desde épocas inmemoriales como uno de los remedios caseros más eficaces contra el asma.

EN LA PREVENCIÓN DEL CÁNCER Consumir ajo puede reducir el riesgo de padecer ciertos tipos de cánceres, como el de estómago, esófago, páncreas y mamas, indica el Instituto Nacional de Cáncer en Estados Unidos. Las propiedades preventivas de este alimento estarían vinculadas a sus efectos antibacteriales, la capacidad de bloquear la formación de sustancias que pueden provocar la enfermedad y el poder de reducir la proliferación de células cancerígenas, entre otras.

PROPIEDADES DIGESTIVAS Este alimento tiene además propiedades digestivas, gracias a que estimula la función del hígado y el páncreas, según afirma el portal de noticias Emol. Por otro lado este contribuye a la limpieza y la desintoxicación del organismo.